Los pilotos Carlos Sáinz y Carlos Sánz Jr., en 'El Hormiguero'
‘El Hormiguero’
Lo que ha crecido el cuello de Carlos Sainz Jr. esta temporada
El piloto de Ferrari y su padre acudieron por primera vez juntos a un programa de televisión
Los Sainz, padre e hijo, acudieron juntos a un plató de televisión. Por primera vez: ¡lo que no consiga El Hormiguero! Mientras el equipo del alma de ambos jugaba en San Mamés, ellos comparecieron junto a Pablo Motos.
El vástago acabó el Mundial en quinta posición de la clasificación de pilotos y por delante de su compañero de equipo: «Se da importancia a esta batalla porque es el único que lleva el mismo coche que tú. Es simbólico, pero importante», explicó. ¿Ve a Max Verstappen y Lewis Hamilton a su alcance en un futuro próximo?: «Con el mismo coche se puede. Con más igualdad de condiciones. El problema es que, este año, el Mercedes y el Red Bull iban ocho décimas-un segundo por vuelta más rápido y, entre pilotos, quiero pensar que no hay más de dos o tres décimas [de diferencia], en un día bueno o un día malo de cualquiera. Espero que la Fórmula 1 el año que viene esté más igualada y podamos competir todos más en igualdad».
Que es un deporte tremendamente exigente desde el punto de vista físico lo sabíamos. Sainz Junior lo corroboró con un dato: «Los coches este año son muy físicos, pasamos muy rápido la curva, y la fuerza G hacen al final que crezca el cuello. De marzo a ahora, 22 carreras, ha ido creciendo». De entrada, no dio cifra alguna. Pero Motos le preguntó si le había crecido concretamente tres centímetros. «Es cierto. Llegan tres meses en que encoge, porque no estoy subido a un Fórmula 1, y a partir de marzo el año que viene me volveré a subir a un Fórmula 1 y hasta diciembre del año que viene me volverá a crecer».
El hijo se ha adentrado en terrenos donde no ha competido el padre, que fue campeón del mundo de rallies y del Dakar. ¿Lo ha superado? «Es muy bueno. Competimos mucho entre nosotros. Siempre he procurado no darle mucho elogio, y eso parece que no le ha sentado muy bien», reflexionó Carlos Sainz senior. «Él siempre me ha dicho que el halago debilita», replicó el hijo. «Es un tío serio, muy carismático, como ya sabéis, y bastante duro. Ha tenido mano dura en el buen sentido. Me ha educado para ser siempre mejor, para superarme a mí mismo», se extendió.
Entre ellos compiten a deportes que nada tienen que ver con el motor. «Me gana al squash. Fue campeón de España. Me pone a correr», confesó el hijo. En el deporte de los palos y los hoyos también se imponía el padre, hasta que hace poco el piloto de Ferrari se entrenó con unos profesionales y, a la vuelta, logró dar la vuelta a la tortilla: «Volví con un swing nuevo y está celoso», bromeó.
Acudieron a El Hormiguero para presentar el documental Vivir para competir (Amazon Prime). «Sale hasta el vídeo de mi boda. Yo no lo había visto y he aprovechado para verlo», contó entre risas el ex campeón mundial de rallies. Por cierto, se promocionó con la única pequeña crítica que el hijo hace del padre («a veces le ha faltado un poquito de mano izquierda»).
Lágrimas del padre
El momento más emotivo de la entrevista fue cuando el hijo recordó su infancia. Entonces, el piloto de rallies se se pasaba más de 250 días fuera del domicilio familiar. «Me acuerdo que mi padre estaba poco en casa, y que la que nos cuidaba era mi madre. Luego llegaba mi padre y era como la noticia. Y toda la semana giraba en torno a aprovechar que está papá en casa. Yo nací en el 94. Hasta el 2004 que se retiró, mis diez años de infancia, digamos, estuvo poco», contó mientras su padre se secaba una lágrima.
Con dos añitos, el niño iba con un coche eléctrico por casa. Un poco más tarde se enganchó a El Gran Circo: «A mí me encanta la Fórmula 1. Yo con 9 ó 10 añitos iba a su cama y lo despertaba a las cuatro de la mañana para ver a Fernando Alonso correr en Australia».
Ahora es el hijo el que se ausenta de la casa familiar. Vive en Italia, se pasa entre 150 y 160 días en los circuitos y viene poco a su Madrid natal.
El momento más duro
Los Sáinz, en 'El Hormiguero'
Recordaron juntos un rato muy angustioso. «De los momentos más difíciles fue el accidente este que tuvo en Rusia. Fueron 20 minutos que no se lo deseo a nadie», confesó el padre con la voz aún encogida. Ocurrió en 2020. Él y su mujer, Reyes, lo estaban viendo por la tele desde Madrid.
Dentro del coche, Carlos Sainz Jr. estaba bien. Ileso. Y eso que fue un accidente en el que alcanzó un pico de 46G. O sea, «46 veces mi propio peso», detalló. Pero nadie más que él lo sabía en ese angustioso momento porque no pudo salir, puesto que la barrera de protección se lo impidió. Y la radio se estropeó.
Al padre lo llamaron fuentes oficiales de la Fórmula 1. «Creo que está consciente de que está bien, pero hay que esperar», lo informaron. Después lo vieron salir por su propio pie y ya respiraron aliviados.
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