Falta un punto. ¡Sevilla, caldera por España!
Vamos, un España-Malta a la inversa. Y, ojo, también en Sevilla. Que espero será una caldera que ríanse de la de Taburiente. Menos pitarles el himno a Güler y sus paisanos, que eso cutre y feísimo, hay que hacerles de todo en pos de su total desequilibrio.
Imponente, oigan, La selección cerró su irresistible fase de clasificación para el próximo Mundial, sector partidos como visitante, con un triunfazo en Georgia (0-4) Otra súper lección de fútbol que añadir a las vividas en Bulgaria (0-3) y Turquía (0-6) Aquellas preciosas e inolvidables gestas. El balance arroja un global de 13 goles a favor y ninguno en contra. Treinta partidos llevamos sin perder, ¡toma ya!
Cifras y juego que nos llenan de moral y optimismo pensando en la gran cita del verano y espanta a todos los rivales estén ya clasificados, por clasificar o ni una cosa ni la otra. Pero pese a tales exhibiciones la cosa está por rematar, fíjense. Los tenaces turcos vencieron a los búlgaros -un gol en todo el torneo, vuelva Stoitchkov- y se jugarán el martes la cabeza del grupo con los nuestros: si nos ganan por siete goles o más nos mandarán a la repesca.
Vamos, un España-Malta a la inversa. Y, ojo, también en Sevilla. Que espero será una caldera que ríanse de la de Taburiente. Menos pitarles el himno a Güler y sus paisanos, que eso cutre y feísimo, hay que hacerles de todo en pos de su total desequilibrio.
Estamos pues a un paso de ser otro de los 48 equipos que disputarán el próximo campeonato del mundo, quien lo iba a decir cuando conocimos el Grupo de la Muerte que nos había tocado. Será la mar de original pues por primera vez se jugará en tres países, a lo largo de cinco semanas y viviremos 104 partidos, 40 más que en Qatar'2022. 40 partidos son dos más de los que un equipo español de Primera División disputa en 10 meses de Liga, 38. ¿Un espanto? Sí, espantoso.
El partido fue uno de los mejores de la versión bailar con tu hermana por la emoción. Como tantos de los que se disputarán estos días, los que ya se disputaron y los que llegarán. No hay por donde cogerlos. No existe hueco posible en el calendario para tanto partido, pero no hay manera: el negocio no puede parar. Y clubes y futbolistas tragan. Y médicos y entrenadores y tal: les den.
Una cabezonería maligna que provoca tardes/noches para muy poco y los inevitables lesionados. Sólo en el Real Madrid cayeron hasta ahora Huijsen, Camavinga y M'Bappé, uno por línea. Veremos cuanto tiempo estarán fuera de combate. Y queda una jornadita más. ¿Lamine? Lo suyo va bien, gracias.
Pues eso, q0ue ganó España. Unai y sus defensas imaginamos que están bien de forma, pues verles les vimos cuando los himnos. Si llegamos a poner a Zubi, Chendo, Goiko, Xavi Aguado y Monreal el asunto hubiese acabado igual. Además, pues lo que sabemos: Zubimendi es muy bueno, igual podría jugar en el Madrid. También Fabián. Oyarzabal nunca falla. Casi nunca Ferran Torres. Y Merino. Ese muchacho Barrios, En fin, todos. Que tenemos un equipazo. Que España será una de las grandes favoritas en junio, quizá la que más junto a Argentina. Que esto pinta muy dulce.
Ah, sí. el Brasil carlettiano ganó a Senegal por 2-0 lo que quizá indica que están despertando de su larga siesta. Por concretar, se tumbaron en 2002 y siguen sin levantarse. El momento más impresionante del partido fue cuando Casemiro marcó un bonito gol a pase de Rodrygo. Tanto que la torcida se puso tiesa. Ya saben que la torcida no es una señora o señorita, es como la llaman allí a su afición.
Total, que los españoles somos muy buenos, sí. Juegue quien juegue. Desde De la Fuente al extremo más alejado del banquillo. Pero esto es un coñazo.