
Djokovic, en una imagen de archivo
Novak Djokovic da pistas sobre su futuro: «Lo único que me motiva son los Juegos de Los Ángeles»
En una entrevista en el canal de YouTube 'Neuspjehprvaka', el serbio afirmó que lo único que le motiva en estos momentos es llegar en la mejor forma posible a la cita olímpica de 2028
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Novak Djokovic está afrontando la recta final de su carrera deportiva. Con 38 años recién cumplidos, el tenista serbio es consciente de que el tiempo pasa para todos y que el relevo generacional en el deporte de la raqueta está más que presente.
El tenista de Belgrado sabe mejor que nadie que está obligado a dosificarse. Su forma física es envidiable, pero su edad ya no le permite jugar absolutamente todos los torneos. Por eso mismo, en esta fase de su carrera 'Nole' debe de seleccionar todos aquellos torneos en los que se sienta realmente competitivo.
La prioridad de Djokovic, en estos momentos, es disputar los Grand Slams. El serbio se quiere convertir en el tenista con más majors de la historia y, conociéndole, no va a parar hasta conseguirlo. De momento tiene 24 y quiere uno más, ese que le sirva para superar a la extenista australiana Margaret Court.
Sin embargo, y más allá de los Grand Slams, hay otro título que le gustaría repetir a Novak Djokovic. En una entrevista en el canal de YouTube 'Neuspjehprvaka', el serbio afirmó que lo único que le motiva en estos momentos es llegar en la mejor forma posible a los Juegos Olímpicos de Los Ángeles, que se disputan en el verano de 2028, fecha en la que el serbio tendrá 41 años.
«Lo único que tengo en mente ahora mismo, lo único que me motiva, son los Juegos Olímpicos de 2028 en Los Ángeles. También representar a mi país y los Grand Slams, pero sobre todo los Juegos», reconoció Djokovic.
Y en esa misma línea, el serbio aseguró que sigue con ganas de jugar más años: «Amo el tenis y me sigue encantando empuñar la raqueta. El niño que hay en mí que se enamoró del tenis sigue ahí, aún siento esa conexión. Si no tuviera esa pasión y ese deseo por competir no seguiría, pero aún me gusta salir a una pista a ganar».
Eso sí, no todo fue un camino de rosas para Djokovic. En el año 2016 atravesó uno de sus peores momentos como tenista profesional que lo provocó una crisis existencial. «Lo había ganado todo y sentía un vacío. Después de París, me sentí obligado a ir a Wimbledon, pero en realidad no quería. Perdí con Querrey tras tres interrupciones por lluvia. Durante el descanso, sentí una sensación de vacío total, como si por primera vez todo se hubiera detenido. Esa crisis duró hasta 2018, tuve que recuperar mi hambre».