El precio de los huevos se dispara: por qué Planas no propone una bajada de IVA
El Gobierno sigue sin deflactar las bases de IRPF porque se beneficia de las subidas del IPC
Creo que ya lo he comentado en varias ocasiones: la inflación, dependiendo de quién esté en el gobierno, puede tener un tratamiento u otro. En situaciones de incrementos importantes de precio, cualquier gobernante que piense en el bien común pone por delante a los ciudadanos antes que la recaudación. Y, si hay que hacer sacrificios con determinados gastos públicos –como subvenciones internacionales–, se recortan de forma inmediata para bajar los precios y cortar de raíz problemas concretos con medidas fiscales como bajar el IVA.
Voy a poner un ejemplo claro, la gripe aviar. Sabemos que, en el año 2024, en Estados Unidos hubo que sacrificar 23 millones de aves, lo que llevó a incrementar los precios de los huevos en un 500 %. Los americanos llegaron a pagar entonces un dólar por huevo.
En España se detectó el primer brote en el mes de julio, pero el ministro de Agricultura ha necesitado casi cuatro meses para tomar la decisión –fácil y que tanto le gusta a este Gobierno– de «confinar» a todas la aves de corral. Es exactamente lo mismo que hicieron con nosotros en marzo de 2020, con la diferencia que las gallinas por mucho que cacareen nadie va a presentar en su nombre un recurso en el Constitucional.
Luis Planas se ha quedado tan contento con la decisión tomada y ya puede volver a tirarse a la bartola hasta dentro de cuatro meses, cuando diga que los precios de los huevos se han disparado y que van a tomar medidas inmediatas.
Para que nos pongamos en contexto, el índice de precios de los huevos ha pasado de 142,409 a 174,492 en un año, un 22,5 % más. Saliendo de la pandemia, era del 97,671, lo que indica que desde entonces se han disparado un 78,7 %. ¿Alguien en el Gobierno ha pensado que, en lugar de subvencionar con 2,5 millones de euros a los pescadores de Perú, no podríamos hacer un esfuerzo de bajar el IVA de los huevos del 10 % al 0 % para aliviar el gasto doméstico y evitar que el IPC se dispare?
En el mes de octubre, el IPC ha crecido un 0,7 %. Ha sido el peor mes desde abril de 2024 y debería sensibilizar al Gobierno que este tipo de subidas empobrece cada día más a los españoles y lo hace por varios motivos. El ajuste en ingresos, tanto de pensionistas como de trabajadores tarda siempre un año en realizarse, a lo que hay que añadir que las subidas pueden provocar y ya han provocado en muchos casos salto de escala en la retención del IRPF, con lo cual el ingreso neto –al no ajustarse a la inflación los baremos de retención– produce que el incremento del dinero percibido es inferior a la inflación. Si además el trabajador tiene que pagar un 6,5 % más de cotizaciones sociales por la subida, el neto a veces puede ser ridículo.
Por eso, desde hace mucho tiempo, llevo diciendo que a quien está beneficiando esta inflación es al Gobierno de la nación, que no para de crecer en sus ingresos a través de la Agencia Tributaria y de la Seguridad Social. Precisamente por eso el Ministro de Agricultura ni se ha atrevido a plantear una bajada del IVA de los huevos: porque si lo propone, le cortan los suyos.
Para que veas donde estamos, he preparado la siguiente tabla con los datos que ha publicado el INE:
Como pueden ver, los precios en octubre han subido un 0,7 % y, en los últimos doce meses, un 3,1 %. Pero con un problema añadido: noviembre del 2024 fue un mes de un 0,2 %; es decir, si el IPC de noviembre crece más de un 0,2 % nuestro IPC anual seguirá siendo todavía mayor.
Pero hay otro tema muy preocupante para los hogares y las familias. La Alimentación en octubre ha tenido una subida del 1,4 % y el Índice se ha colocado en 133,195, el mayor de los 12 subíndices y un 11,6 % por encima de la media.
El Gobierno le ha echado la culpa de la subida del IPC –cómo no– a las energéticas. Y es cierto que llevan una subida anual acumulada del 7,5 %, pero quizás deberían mirar por qué estamos así y si el apagón del 28 de abril tiene que ver con la decisión de producir cada día más energía utilizando el ciclo combinado, que equilibra y sincroniza la producción eléctrica, pero es mucho más caro y es de idiotas supinos no utilizar las centrales nucleares a su máxima potencia. Luego tenemos otro subíndice, el del vestido y calzado, que se ha disparado en octubre un 8,2 % en un solo mes.
Pero cuando la ideología está por encima del bienestar de la población, encontramos que no se deflactan las bases de retención del IRPF, la inflación le beneficia al Gobierno y por todos los medios se trata de tener más gente acogotada y necesitando de subsidios para poder vivir. Esta es de nuevo otra demostración palpable de que la economía real no va bien.