Ya han pasado nueve meses y llevamos ejecutados un 0,55 % del PIB en Defensa

Este martes, 18 de noviembre, el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, se ha reunido con Pedro Sánchez, para profundizar en la cooperación España-Ucrania en materia de defensa, en especial de la antiaérea y el apoyo de nuestro país a Ucrania.

Da igual lo que diga Sánchez. Él tiene cada día más claro que su compromiso con la OTAN, firmado en junio de este año, es papel mojado para él, que no piensa cumplir ninguno de los compromisos firmados y que su objetivo es tratar de que Sumar no se la monte y en un ataque de caspa y ante la situación que tienen en las encuestas, le dé a Yolanda Díaz por tirarse al monte e irse a la oposición, por algo tan «poco importante» como es la OTAN y lo firmado con ellos.

La Intervención General del Estado ha publicado hace unos días los datos de las ampliaciones de créditos, ministerio a ministerio... Es decir, los Presupuestos Generales del Estado a septiembre de 2025 aprobados en Consejos de Ministros, durante estos nueve primeros meses y lo ya ejecutado, o al menos comprometido y en fase de ejecución.

Para que se hagan una idea, de lo que ronda por la cabeza de Sánchez y de su ministra de Defensa, Margarita Robles, es cualquier cosa, menos preocupación por los compromisos acordados en junio con Mark Rutte, secretario general de la OTAN, con Úrsula Von der Leyen y con todos los primeros ministros o presidentes de los miembros de la OTAN, incluido Donald Trump, que se ha convertido en un perro ladrador, pero poco mordedor, al menos de momento.

Esta afirmación, de que a Sánchez y a Robles les preocupa poco lo firmado, se basa en que en el mes de septiembre se han ampliado los créditos del Ministerio de Defensa en 23,7 millones.

Pero si esa cifra está muy lejos del 3,5 %, lo ejecutado hasta agosto era ridículo, pues llegaba solo a 8.216 millones, equivalente a un 0,49 % del PIB.

Hoy lo que vamos a ver es cómo han evolucionado estas cifras y dónde se encuentra el Gobierno en el nivel de cumplimiento:

Cómo pueden ver en estos datos obtenidos de los informes de la IGAE, las obligaciones reconocidas y, por lo tanto, lo que ya es seguro que se va a pagar y que España puede aportar a sus compromisos, ha subido en un mes en 930 millones y ha pasado a suponer un 0,55 % del PIB (un PIB estimado por la presidente del INE o por Economía, porque en el INE no sabemos ya quién manda).

Esto, como mínimo, quiere decir que Defensa de aquí a final de año va a meter 10.000 millones de euros más al gasto de la Administración General del Estado y que si hacen un esfuerzo para llegar al 2,1 %, que no lo van a hacer, les faltarían 16.000 millones más.

Si alguien después de esto tiene alguna duda de que se ha reído de Zelenski en sus propias narices es que vive en Babia. ¿Qué pasará cuando la OTAN, Trump, Von der Leyen y los primeros ministros de los países miembros de la OTAN se den cuenta de que se han reído de ellos?

Me temo que, de forma individual, nos pondrán la etiqueta de no hacer negocios con España, por país poco fiable. Von der Leyen hará un avestruz, sin duda alguna, y no querrá saber nada. Rutte bramará en el desierto y tratará de maniobrar contra Sánchez, cosa que hoy a Sánchez no le preocupa. Trump volverá a coger el carro de las chufas y, como es imprevisible, no tengo ni idea de por dónde saldrá, porque si manda mensajes contra Sánchez sin hacer nada más, el que sale beneficiado es Sánchez. Que yo sepa Trump tiene varias armas que utilizar contra Sánchez, una es Zapatero, al que puede colocar en el disparadero, Israel y el Pegasus que sigue ahí y, sobre todo, el poder de los EE.UU., pero me temo que tiene en estos momentos otros problemas.

Así que soy pesimista y muy posiblemente habrá un ganador, Sánchez, y un perdedor, España, que seguirá reduciendo su capacidad de negociación internacional a Brasil, Colombia y China.