Los casos en los que puedes ser despedido estando de baja médica

Entendemos por baja médica aquel periodo que un trabajador necesita para recuperarse de una enfermedad o accidente y, por lo tanto, no acude al trabajo. Se trata de un derecho de los trabajadores que les permite ausentarse de su puesto de trabajo de forma justificada hasta que su salud se recupere. Durante la baja se percibe un subsidio para sustituir el salario habitual, pero el tiempo máximo que se puede estar de baja laboral es de, como mucho un año. En casos excepcionales, el médico puede ampliar la baja durante 180 días más, siempre y cuando el paciente tenga mejoría.

En España, los tipos de bajas laborales se distinguen en dos grupos: contingencias comunes, que incluye la enfermedad común y el permiso por maternidad y paternidad; y las contingencias profesionales, que incluye las enfermedades relacionadas con la actividad laboral.

Un trabajador puede pedir cualquiera de las dos, por motivos justificados, y la empresa debe aceptar este periodo de ausencia del trabajador. En ningún caso un trabajador puede ser despedido simplemente por el hecho de pedirse una baja médica. Sin embargo, estando de baja, la empresa puede rescindir el contrato del trabajador por diversos motivos.

Motivos por los que pueden despedir a un trabajador

Según se especifica en el artículo 54 del Estatuto de los Trabajadores, se puede rescindir el contrato de un empleado si se incurre en alguna de las siguientes irregularidades:

• Las faltas repetidas e injustificadas de asistencia o puntualidad al puesto de trabajo.
• La indisciplina o desobediencia en el trabajo.
• Las ofensas verbales o físicas al empresario o a las personas que trabajan en la empresa o a los familiares que convivan con ellos.
• La transgresión de la buena fe contractual, así como el abuso de confianza en el desempeño del trabajo.
• La disminución continuada y voluntaria en el rendimiento de trabajo normal o pactado.
• La embriaguez habitual o toxicomanía si repercuten negativamente en el trabajo.

Es importante destacar que la baja médica nunca puede ser tomada como una falta al trabajo injustificada. Sin embargo, un trabajador podría incurrir en la transgresión de la buena fe contractual, así como el abuso de confianza en el desempeño del trabajo durante una baja médica si miente sobre su estado de salud o su capacidad a la hora de ejercer su trabajo.

Además, la empresa también podría despedir a un empleado alegando motivos económicos, técnicos, organizativos o de desobediencia del trabajador, entre otros.