Un alumno haciendo sus deberes
Drama escolar El llanto desesperado de una niña por la cantidad de deberes que tiene: «Tengo que ir a un psicólogo»
Su reacción, viral en TikTok, pone sobre la mesa otra vez el debate de las tareas escolares: «Que me van a reñir, que me van a reñir», sollozó
El debate sobre si la cantidad de deberes que reciben los niños es la adecuada, vuelve a estar sobre la mesa.
Y es que, el asunto de si las tareas que deben hacer los alumnos más jóvenes en casa es o no es lo más conveniente para su educación y su desempeño posterior en el aula despierta enconadas y apasionadas discusiones.
La última muestra, ampliada y difundida por las redes sociales, no ayudará en nada a la cuestión, por lo excesivo del asunto.
El drama viral lo sirvió una niña en TikTok al cerciorarse de la gran cantidad de deberes escolares que debía hacer para las pasadas vacaciones de Navidades.
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La pequeña estudiante acabó en medio de un ataque de nervios cuando pasó a relatar la enorme cantidad de tareas que debía llevar realizadas para la vuelta a clase en enero. Fue Nuria Ruiz la que mostró la reacción desgarradora, por decir algo, de su hermana pequeña.
En su llanto, la niña no encontraba consuelo: «Que me van a reñir, que me van a reñir». Su temor era tal que incluso deslizó la posibilidad de acudir a un profesional: «Tengo que ir a un psicólogo, pero ya, porque no es normal». Aunque esto haya podido provocar muchas risas, entre ellas las de su hermana, no deja de ser una frivolidad y una banalización más de un problema de salud pública como es el área mental.
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Interviene un profesor
El debate creció en intensidad cuando intervino el profesor Álvaro Patón, otro docente conocido en TikTok. «Yo soy el primero que piensa que si una persona ha hecho su trabajo y las cosas bien, no tiene por qué tener tarea en vacaciones», afirmó.
«Desconozco si le han mandado la tarea a ella porque lo necesita o a toda la clase, pero me parece un poco locura. Aquí veo dos grandes problemas, uno que no se haya organizado y otro la excesiva carga de trabajo».
¿A favor o en contra?
Las vacaciones largas, bien sean de Navidad o de verano, son un momento de descanso, pero hay profesores partidarios (igual que los hay en contra) de no dejar desconectar completamente el cerebro. Uno de ellos es Carlos Fernández, presidente de la Asociación de Profesores de Madrid.
«El cerebro, al igual que otros músculos, necesita actividad», explica Fernández en un reportaje que sobre este tema hizo El Debate. El profesor defiende que debido a periodos de inactividad extensos puede atrofiarse, sobre todo en edades en las que todavía se está formando. En esta línea, es partidario de asignar a los niños ciertas tareas intelectuales. «Porque se escoja una hora de cada día, de todas las que tiene el verano, se puede estar perfectamente de vacaciones y realizar actividades», explica, para terminar sentenciando que algo tan importante como es la enseñanza y la educación de los niños «no se puede dejar de lado un tercio del año».
En el lado contrario de la balanza, Mercedes Gil, directora de Montessori British School de Murcia, comparaba poner deberes a los niños en verano como si un jefe obligase a sus empleados a realizar horas extra sin remunerar durante sus vacaciones. «Son la preparación del sistema educativo industrial para la obediencia laboral. Algo muy del siglo XIX», exclama.
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