Sánchez acusa al PP y a Vox de «lastimar a España» con sus ataques al Gobierno

«Tenemos una oposición que, con tal de hacer daño al Gobierno, no se dan cuenta de que a quien lastiman es a España», ha criticado el presidente del Gobierno en un discurso cargado de reproches a la «derecha y ultraderecha». Desde Andalucía, arropando al candidato socialista de las futuras elecciones autonómicas, Juan Espadas, el secretario general del PSOE ha arremetido contra la oposición del Ejecutivo: «¿Qué intereses defiende la derecha?» o «la oposición no puede ser sinónimo de un éxito de que a tu país le vaya peor» han sido algunas de las frases que Pedro Sánchez dirigió a Casado y a Abascal.

Rotundo muro a la oposición

Parafraseando al fundador del PSOE, Sánchez recordaba al inicio de su discurso a Pablo Iglesias, cuando subrayaba que los partidos políticos «no se hacen fuertes por las estridencias y desplantes, solo cuando saben los intereses a los que sirven». Todo un alarde de socialismo casi marxista que precedió a las críticas hacia la formación de Pablo Casado. «¿Qué intereses defiende la derecha (…) cuando la vemos votar que no?», enumeraba el socialista para referirse a la falta de apoyo del PP en las Cortes respecto a la reforma del sistema de revalorización de pensiones, la subida del salario mínimo interprofesional o la Ley de eutanasia.

Así, el jefe del Ejecutivo ha explicado que durante la pandemia «la derecha votó en contra sistemáticamente», una actitud que Sánchez no entiende, dado que se vieron «obligados a que la gente se confinara en casa y por tanto, proteger su salud y la de sus familiares». Tampoco Sánchez ha comprendido por qué el ala conservadora del Parlamento se ha opuesto a modificar la mención de la Carta Magna de «disminuidos» referida a las personas con discapacidad e incluso les ha achacado que hoy «ponen trabas para que no lleguen los fondos europeos a España». Sánchez ha apuntalado que el PSOE es «el único partido capaz de llegar a acuerdos» con todos: instituciones, sindicatos y resto de formaciones. El presidente ha asegurado que «durante todo el tiempo de gobierno» harán «lo mismo: dialogar para acordar y acordar para que la clase media salga adelante».

El insulto inventado hacia Montero

Los amortajamientos hacia el partido de Abascal tampoco han faltado en la intervención del líder del PSOE. 

«La oposición lo que hace es gritar e insultar, ¿verdad María Jesús?» ha espetado Sánchez dirigiéndose a la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, en referencia al supuesto insulto del pasado miércoles sobre el que algunos medios de comunicación informaron. 

Una ofensa que nunca tuvo lugar, como desmintió la propia formación públicamente a los instantes de verse volcada la información falsa sobre Vox; y que, sin embargo, ha sido oportunamente traída a la palestra por el socialista, este domingo en el malagueño Palacio de Congresos de Torremolinos.

«Socialdemocracia» frente a «neoliberalismo»

Esa «socialdemocracia» vendida por Sánchez como panacea para resolver todos los problemas sociales y económicos que sufre España no ha parado de ser explicada hasta la saciedad en todos y cada uno de los discursos del socialista durante este fin de semana. Un pensamiento político que, en opinión del presidente del Gobierno, es «el único en pie» actualmente para la «salida de la crisis».

Presupuestos sin socios mayoritarios

Consciente de sus socios en el Parlamento, Pedro Sánchez ha vuelto a apelar al más puro discurso político afirmando que el Gobierno ha presentado unas cuentas públicas «en las Cortes Generales que son socialdemocracia de manual», con inversión en salud, educación, sistema nacional de dependencia o cultura, entre otras materias.

Una dura intervención la del presidente del Gobierno en la clausura del XIV Congreso Regional del PSOE-Andalucía que ha contribuido a polarizar aún más las posiciones no sólo en el gobierno andaluz de cara al próximo plebiscito autonómico, sino también en el caldeado ambiente de las Cámaras representativas de la soberanía nacional.