Puigdemont a su entrada al Four Seasons del Bergues, acompañado por Josep Lluis Alay, para reunirse con un contacto ruso
Las pruebas de la conexión rusa de Puigdemont
«La opresión a los rusos en Ucrania es repugnante... como en el caso catalán»
El mensaje de un alto cargo del Kremlin a la mano derecha de Puigdemont evidencia los lazos del movimiento secesionista con Putin
«La forma en que e establishment político europeo ignora todas esas cosas opresivas que se les hace a los rusos en Ucrania es realmente repugnante, ya que son dobles estándares. Bueno, eso lo sabréis mejor que yo respecto al caso catalán...». Este es el texto de un mensaje que el jefe de la oficina de Carles Puigdemont, Josep Lluis Alay, tenía en su teléfono móvil, y que fue enviado por Evgeni Primakov. Primakov fue nombrado en junio de 2020 director de Rossotrudnichestvo, la oficina de relaciones internacionales del Kremlin.
Alay se vanagloriaba de tener una estrecha relación con Primakov, como demuestran las cadenas de mensajes intervenidas en su móvil, y que se encuentran sujetas a investigación judicial. En concreto, es el Juzgado de Primera Instancia de Barcelona el responsable de las indagaciones.
El 26 de septiembre de 2020, Alay envía como si exhibiera un trofeo el pantallazo del mensaje que encabeza esta información a Gonzalo Boyé, abogado de Puigdemont. A continuación, se registra el siguiente cruce de wasaps:
-Josep: Evgeni Primakov, mano derecha de Putin en el Kremlin para relaciones internacionales.
-Gonzalo: Excelente. Se salva la situación. Buen trabajo
-Josep: Borra por favor
-Gonzalo: Voy
-Josep: Solo hace dos meses lo nombró Putin director de Rossotrudnichestvo. Algunos dicen que tiene más poder que el ministro de Asuntos Exteriores.
Unos momentos más tarde, Alay añade:
-Josep: Necesitábamos oxígeno con Moscú
-Gonzalo: Sin duda, igual tendríamos que ir a verles.
-Josep: Cuando haya vuelos, vamos. (En ese momento los viajes estaban limitados por culpa de la pandemia)
-Gonzalo: Sería lo mejor
Previamente, el 25 de junio de 2020, Alay ya había informado a Puigdemont, quien utiliza el apodo de «K», del nombramiento de Evgeni Primakov, que valora como un apoyo del secesionismo en el Kremlin: «Una buena noticia de Moscú. El presidente ha nombrado al diputado Evgeni Primakov (y director del programa de TV que te entrevistó) como director de la Agencia Federal Rossotrudnischestvo, que depende de Exteriores y que se dedica a promover la presencia de Rusia en el mundo».
Josep Lluís Alay (primero por la izquierda), que fue detenido en Alemania cuando acompañaba a Puigdemont, llega a la Audiencia Nacional para declarar
Es especialmente llamativo un cruce de mensajes que tiene lugar entre Alay y Alexander Dmintrenko en junio de 2020. Dmintrenko es otro de los contactos rusos de Alay. Alexander le envía un enlace sobre Evgeny Primakov, recién nombrado de conformidad con el decreto del presidente ruso.
Le dice que «es una buena posición para activar cosas entre nosotros». Alay le pregunta que cuál sería el equivalente del cargo de Evgeni y este le contesta que como «Catmon». Pero después rectifica y dice que como «Diplocat», un consorcio manejado por el secesionismo para proyectar sus reclamaciones en el exterior.
El pasado día 17, y tras las revelaciones de El Debate, la Comisión de Asuntos Institucionales (CAI) del Parlament aprobó por unanimidad la solicitud presentada por Ciudadanos para que el jefe de la Oficina del expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont, Josep Lluís Alay, comparezca en la comisión para que «informe sobre su relación con los servicios secretos rusos».
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