El Rey, la Princesa de Asturias y la Infanta Sofía con los alcaldes de Catarroja y de Aldaia
Casa Real La alcaldesa que se enfadó con los Reyes y ahora acude a las recepciones
La socialista Lorena Silvent criticó duramente a Don Felipe y Doña Letizia hace un año cuando visitaron su municipio por sorpresa y sin avisarla tras la dana, pero la relación se ha recompuesto
Hace casi un año, en vísperas de Navidad, los Reyes realizaron una visita familiar a tres municipios de Valencia -Catarroja, Picaña y Alacuás- que habían sido afectados por la dana. Fueron con sus hijas, la Princesa de Asturias y la Infanta Sofía, para dar una sorpresa a los vecinos y decirles que no les habían olvidado.
Como era una visita privada y familiar, los Reyes no avisaron a ninguna autoridad. Su intención era saludar a los vecinos y que supieran que no estaban solos. Esta visita se produjo el 22 de diciembre de 2024 -día del sorteo del Gordo de Navidad-, siete semanas después de los incidentes de Paiporta, donde los vecinos les recibieron muy enfadados y les lanzaron piedras y barro al verles aparecer con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que decidió abandonar a los Reyes en medio de la bronca.
La gente, emocionada con la visita
Cuando les vieron aparecer en Catarroja, los vecinos empezaron a avisarse los unos a los otros. Los cuatro miembros de la Familia Real pasearon por las calles, se acercaron al mercado municipal y pasaron a un bar a tomar el aperitivo. La gente agradeció su gesto con muestras de cariño y vivas; algunos se emocionaron tanto que no pudieron contener las lágrimas. Se hicieron fotos con ellos y los abrazaron.
El Rey con la Princesa y la Infanta Sofía en el restaurante Albufera tras la visita a Catarroja
Después los Reyes y sus hijas se fueron a comer al restaurante Albufera, de El Palmar, en cuyo comedor habían reservado una mesa con nombre ficticio. Cuando llegaron, les recibieron con vivas y muestras de afecto y, tras el almuerzo, el Rey pidió al dueño del restaurante, Hans Peter Onofre Arnold, que se sentara y le contara cómo estaba la situación tras la dana. A continuación, se fueron a los municipios de Picaña y Alacuás, donde tampoco avisaron a las autoridades.
La queja de la alcaldesa
Todo el mundo entendió que se trataba de una visita privada y que los Reyes no querían ir con un séquito de políticos. Todos, menos la alcaldesa de Catarroja, Lorena Silvent (PSOE), que ese mismo día criticó a Don Felipe y Doña Letizia y dijo que, aunque ella estaba a menos de cien metros de donde se encontraban ellos, no se acercó a saludarles porque «le parecía una falta de respeto» que no la hubieran avisado.
En declaraciones a la agencia Efe, Silvent les acusó de haber visitado una parte de la localidad «más operativa» para aparentar «una cierta normalidad, que no es real», y añadió que «mientras la gente está trabajando, ellos están tomándose un refresco».
Los alcalde de Catarroja y Aldaya con la Reina en la entrega de los premios Princesa de Gerona
«Lo que tenían que haber hecho es visitar a esos militares que llevan aquí más de 50 días, que están cansados y están haciendo lo que nadie quiere hacer, que están en los garajes, que están sacando coches y enseres, están sacando lodos. Con todo lo que tiene que ver el despliegue militar, tendrían que haber hablado con ellos», afirmó entonces.
Declaraciones injustas
Estas declaraciones de Silvent eran injustas porque, once días antes, el Rey ya había visitado a los militares desplegados en la zona de la catástrofe. Además de la Base Militar «Jaime I» y del Buque de Asalto Anfibio «Galicia», atracado en el Puerto de Valencia, Don Felipe estuvo en la Base Logística Principal del Ejército de Tierra, en la Feria de Muestras de Valencia, dando ánimos a los militares. Y, además, el Rey había visitado el Puesto de Mando del Ejército del Aire y del Espacio y realizado un reconocimiento aéreo en helicóptero de la zona afectada.
Alcaldes de los pueblos afectados por la dana, el pasado domingo en el Palacio Real
A pesar de la dureza de los ataques de Silvent, sus relaciones con la Casa del Rey se fueron recomponiendo en los meses siguientes hasta el punto de que la alcaldesa de Catarroja asistió el pasado julio como invitada a la entrega de los premios Princesa de Gerona, que se celebró en el Liceo de Barcelona y en la que se rindió homenaje a los municipios afectados por la dana. Incluso, junto con el alcalde de Aldaya, Guillermo Luján, regaló un abanico de esa localidad a la Heredera de la Corona.
Silvent también ha acudido, junto a los alcaldes de los 78 municipios afectados por la dana, a la recepción que los Reyes ofrecieron el pasado domingo en el Palacio Real con motivo de la Fiesta Nacional. La alcaldesa que no quiso recorrer 100 metros en Catarroja para saludar a la Familia Real, no tiene ningún inconveniente ahora en coger el tren desde Valencia a Madrid.