
Jaime Mayor Oreja, acompañado de María San Gil y Carmen Fernández de la Cigoña, durante la presentación de la manifestación en defensa de la vida
Mayor Oreja: «Basta ya de silencio cómplice ante el proyecto de ingeniería social del Gobierno»
Más de 200 asociaciones convocan la Manifestación en defensa de la Vida y la Verdad

Los cinco participantes en la rueda de prensa de la Manifestación en defensa de la Vida
Manifiesto de la convocatoria
- Detener el proyecto, de naturaleza totalitaria y de ingeniería social impulsado por el Gobierno, y que se manifiesta en su legislación, práctica política y parlamentaria.
- Defender la vida humana y la dignidad inherente a la misma en todas sus etapas, desde la concepción hasta la muerte natural. Por esta decisiva razón y apelando a esa dignidad nos oponemos a la regulación jurídica actual sobre al aborto, la eutanasia, el suicidio asistido, la experimentación con embriones humanos y todo atentado contra la protección de la vida humana.
- Expresar nuestro más absoluto repudio a la nueva reforma de la regulación del aborto que – sin esperar a la decisión del Tribunal Constitucional sobre la actual normativa- aprueba el aborto decidido por menores entre 16 y 18 años sin consentimiento, ni siquiera conocimiento de sus padres, y elimina el requisito del consentimiento informado. Estamos ante un recorte más, de los que vienen produciéndose, de la patria potestad totalmente inaceptable y peligroso.
- Denunciar la grave irresponsabilidad que significa unir la práctica del aborto de menores, con la supresión de lo que ya era un menguado y limitado periodo de reflexión.
- Rechazar la limitación del derecho a la objeción de conciencia de la ley, que obliga al señalamiento oficial de los objetores, con todo lo que de discriminación para su vida profesional conlleva ante la actual dirección política de la sanidad pública.
- Proclamar que no es misión del Gobierno modelar a su antojo las conciencias y la moral de sus ciudadanos, ni de nuestros jóvenes y niños, ni lo que es verdadero o falso en el ámbito de la ciencia, de la historia y de la filosofía. El Gobierno debe arbitrar y moderar, pero no puede ser, a la vez, árbitro y jugador.