La cantante Madonna
La ciudad francesa de Amiens le pide a Madonna un valioso cuadro
La alcaldesa ha escrito a la reina del pop para que les ayude a convertirse en Capital Europea de la Cultura en 2028
Amiens, al norte de Francia, es conocida por su catedral gótica, su mercado medieval y también por ser la ciudad que vio nacer a Emmanuel Macron. Estas últimas semanas se afanan en mostrar su mejor cara y exhibir su potencial, tras presentar su candidatura a Capital Europea de la Cultura en 2028. Para aumentar su tirón, han recurrido a la cantante Madonna para que les preste una de sus obras de arte. Se trata de la pintura Diana y Endymion, de Jérôme-Martin Langlois, que representa a la diosa romana Diana mirando con amor al apuesto Endymion. La obra ha sido descrita como una representación del deseo sexual femenino. También simboliza uno de esos casos envuelto en misterio que abundan en el mundo de arte, puesto que el rastro de la obra se perdió durante años.
El cuadro salió a la venta en 1989, en una subasta de Sotheby's en Nueva York, y la cantante desembolsó 1,3 millones de dólares por él. Durante una etapa, se exhibió en un museo de Amiens, pero se perdió durante la I Guerra Mundial, después de que Alemania bombardeara la ciudad en 1918.
Nadie sabe con certeza dónde fue a parar. Cuando Jacques Foucart, un distinguido curador del Louvre, investigó el paradero de la pintura en la década de 1970, no pudo encontrar ningún rastro escrito posterior a 1911.
La alcaldesa de Amiens le suplica a la estrella del pop que preste la obra a la ciudad, con la esperanza de aumentar sus posibilidades de ser nombrada capital europea de la cultura en 2028.
Diana y Endymion, de Jérôme-Martin Langlois
«No cuestionamos de ninguna manera la adquisición legal que ha realizado, pero somos candidatos a ser Capital Europea de la Cultura en 2028. Así que me gustaría que en esta ocasión, este año, pudieras prestarnos tu pintura», dijo la alcaldesa de Amiens, Brigitte Fouré, en un video publicado en Facebook.
Un experto en arte de Amiens encontró por casualidad un reportaje sobre Madonna en Paris Match, en 2015. La cantante posaba en las escaleras de su casa, delante de lo que parecía ser la obra maestra perdida de Langlois. La policía francesa abrió una investigación sobre un posible robo de la obra, pero tras siete años, no se ha llegado a una conclusión clara. Solo resulta evidente que si la pintura fue robada en algún momento de su historia, la cantante no es la culpable y habría actuado siempre de buena fe.
Sotheby's lo vendió como réplica del cuadro del mismo título e idénticas dimensiones que el que Langlois expuso en el Salón de París de 1822. No estaba fechado, firmado ni por supuesto aparecía el sello que certificaba la autenticidad.
Sin embargo, algunas personas en Amiens creen que la casa de subastas podría haberse equivocado y haber comercializado la original que ahora está en manos de Madonna.
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