Sofía Palazuelo con el perfumista Alberto Morillas
Los duques de Huéscar, anfitriones en una cena de gala en el Palacio de Liria
Sofía Palazuelo y Fernando Fitz James ofrecieron una cena en honor a su amigo Alberto Morillas como «Leyenda del Perfume»
El Palacio de Liria se convirtió en el escenario de una velada inolvidable este martes con los duques de Huéscar como perfectos anfitriones. Sofía Palazuelo y Fernando Fitz James ofrecieron una cena de gala para su amigo Alberto Morillas. Entre los invitados, la Princesa Sassa de Osma y Blanca Barrera, íntima amiga del colegio de Sofía.
Sassa de Osma y Sofía Palazuelo
«Ayer por la noche reunimos a un grupo de invitados para celebrar la trayectoria de Alberto Morillas y su reconocimiento como »Leyenda del Perfume«, que recibió el día anterior de manos de la Academia del Perfume», explica Sofía Palazuelo. Morillas es un reconocido perfumista español que ha creado algunas de las fragancias más icónicas del mundo. Es el reputado nariz español más internacional, y el creador de innumerables obras emblemáticas.
El Duque de Huéscar este martes, en la cena de gala
Homenaje
«Quisimos rendir homenaje a Alberto con una cena que fusionó arte y cultura. Alberto, además de ser un gran amigo, ha sido un apoyo fundamental en la creación de la primera colección Fitz James Stuart, una propuesta que tiene como objetivo la divulgación cultural del legado de la Casa de Alba a través de la alta perfumería», escribe la duquesa en su Instagram.
Se trata de «un proyecto íntimo y familiar, y por ello ha sido fundamental contar con nuestro amigo Alberto Morillas, quien, gracias a sus raíces españolas, su apoyo incondicional y su profunda implicación, nos ha acompañado en esta aventura»,confiesan los duques de Huéscar, con orgullo, sobre su nuevo perfume.
El galerista Fer Francés charlando con Sofía Palazuelo
Modernidad y tradición van de la mano en esta nueva aventura donde se presentan las primeras cuatro fragancias de una marca que nace para mantenerse a través de las nuevas generaciones.
Los negocios en torno a la familia Alba son cada vez más frecuentes. Si el duque de Alba abrió las puertas de los palacios al público, su hijo mayor, Fernando, pone en marcha la idea del perfume. «La casa de alta perfumería Fitz-James Stuart nace para transmitir la herencia cultural, histórica y emocional de una de las familias más antiguas de Europa. Su objetivo es capturar la esencia de la transmisión a través de perfumes inspirados en espacios, personalidades, arte y naturaleza», explican desde el proyecto.
