Estados Unidos está implementando en sus fuerzas armadas varios sistemas para neutralizar aeronaves no tripuladas e incorporará próximamente un arma casi infalible.
Se trata del sistema Leónidas, desarrollado por la empresa estadounidense Epirus, una unidad capaz de destruir enjambres enteros de drones mediante tecnología de microondas que «fríe» los aparatos enemigos.
Del tamaño de un pequeño remolque, Leónidas puede instalarse en un vehículo blindado Stryker para aumentar su efectividad y seleccionar un objetivo o apuntar a varios de forma indiscriminada.
El sistema de microondas crea un «campo de fuerza» que ningún dispositivo electrónico puede atravesar sin ser destruido.
Por otro lado, los bajos voltajes con los que funciona impiden emisiones nocivas que puedan perjudicar a los operadores del sistema o a la población civil.
El Ejército de Estados Unidos firmó con la empresa Epirus un contrato por valor de 66,1 millones de dólares para adquirir el sistema Leónidas.
En virtud del contrato firmado, la empresa proporcionará inmediatamente varios prototipos del sistema antidrones.