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02 de mayo de 2024

El congresista argentino y candidato presidencial por La Libertad Avanza Javier Milei

El congresista argentino y candidato presidencial por La Libertad Avanza Javier MileiAFP

A una semana de las elecciones, Argentina se enfrenta a una dura batalla entre Massa y Milei

El Debate accedió a los informes de diez consultoras, de las cuales siete dan ganador a Javier Milei y tres a Sergio Massa

Argentina vuelve a sorprender, esta vez, con los candidatos que se aprestan a competir en la segunda vuelta electoral que se realizará el 19 de noviembre: el peronista Sergio Massa, ministro de Economía de un gobierno que llevó a la inflación anual a 150 % y la pobreza al 40 %, y el anarcolibertario Javier Milei, economista que empezó a hacer política en el 2021, cuando se postuló a diputado nacional y se encontraba en la cola en las presidenciales.
La favorita unas semanas atrás, la exministra de Seguridad, Patricia Bullrich, de la coalición de centroderecha Juntos por el Cambio, quedó en tercer lugar. Aunque a horas de obtener un magro 24 % en primera vuelta, lejos de los 36 % que alcanzó Massa y el 30 % que logró Milei, que se consiguió otra vida.
Durante la noche de la derrota, Bullrich se quedó despierta leyendo su tesis doctoral sobre peronismo y hegemonías, recordó que cuando Néstor Kirchner llegó al poder en el 2003 fue captando dirigentes de todos los partidos de oposición para incapacitar a la competencia, que perdió toda posibilidad de alternancia hasta el 2015, cuando Mauricio Macri ganó la presidencia.
«Me acordé que cuando se votó la confiscación de Repsol-YPF (el 3 de mayo de 2012) los que estuvimos en contra fuimos apenas 32 diputados», confesó Bullrich a El Debate.
En efecto, la ley de expropiación de la que por entonces era la principal compañía de Argentina alcanzó una amplia mayoría, con 208 votos a favor. Además del kirchnerismo, la mayoría del radicalismo, los socialistas y aliados de centroizquierda y peronistas, se sumaron a la polémica votación. El Propuesta Republicana (PRO) y unos pocos radicales, los que votaron por la negativa, solo pudieron tener un rol testimonial.
Bajo esos recuerdos, todavía sin procesar la derrota, Bullrich convocó a un equipo y les transmitió que era tiempo de poner en un costado las aspiraciones personales para integrar las dos fuerzas políticas de oposición y así evitar que el kirchnerismo se quede con su quinto mandato, esta vez en manos de Massa. Había que votar a Milei, «el loco».
Macri estuvo de acuerdo apenas su candidata argumentó. De hecho, muchos le criticaron un vínculo con el libertario que él siempre aseguró fue puntual y virtual. «No más de 6 o 7 veces en dos años, y solo lo vi personalmente una vez, cuando Patricia quiso que lo conociera y nos reunimos los tres en casa», según reveló a este diario.
Pero la buena sintonía existía, hasta el punto de que Milei fue quizás el dirigente más elogioso de su paso por la Casa Rosada, declaraciones que siempre acompañó con duras críticas a los aliados de Macri, básicamente los radicales que «no lo acompañaron en las reformas que quiso hacer».
El líder de La Libertad Avanza (LLA) fue todavía más agresivo con la Unión Cívica Radical. «Me levanto y desayuno tirándole dardos a una foto de (el expresidente) Raúl Alfonsín», fue uno de los ofensivos comentarios, intolerables para la dirigencia del centenario partido.
Macri siempre le agradeció los gestos en público, por eso no sorprendió cuando convocó –esta vez él mismo– a Milei a su casa para «hacer las paces» con Bullrich (de quien en el último tramo de la campaña también dijo barbaridades) e iniciar una nueva etapa, de cara a la segunda vuelta. En medio de una feroz presión mediática de parte del gobierno y los medios de comunicación que maneja para que Milei se retire de la competencia, ese acuerdo le inyectó al economista libertario un nuevo impulso que enseguida empezó a reflejarse en las encuestas.
El escenario no es propicio para el gobierno. En la encuesta de «satisfacción política y opinión pública» que publica en forma bimestral la prestigiosa Universidad de San Andrés «el 12 % de los encuestados está satisfecho con la marcha general de las cosas, mientras que el 86 % se encuentra insatisfecho», el índice más bajo desde que se hace la encuesta, en enero de 2016.
Y solo el 17 % aprueba la gestión de Alberto Fernández, en tanto el 81 % lo desaprueba, un porcentaje que se mantiene estable desde julio de 2023, cuando Massa arrancó la campaña electoral.
El oficialista está entre los dirigentes con diferencial negativo más alto (-40), solo superado por la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner (-45 %), la dirigente opositora Elisa Carrió (-52 %), el hijo de Cristina y Néstor, Máximo Kirchner (-59 %) y Alberto Fernández (-69 %). Milei, en cambio, está entre los mejor posicionados (-16 %) junto a Bullrich (-24 %). El propio Macri, usualmente con altos índices de imagen negativa, mejoró notablemente su posicionamiento (-37 %) y hoy está mejor que Massa y Cristina.
En cuanto a cómo votará el electorado, según la muestra de UDESA realizada entre 1017 encuestados entre el 3 y el 8 de noviembre, Milei tiene una leve ventaja en relación a Massa, con 46 % frente a 40 %. Sucede que el estudio consigna que hay dificultad para estimar el 14 % , o porque no responde o porque no define si lo hará en blanco o puede decidirse a último momento.
En definitiva, el resultado es similar a otros estudios que se conocieron en las últimas horas. El Debate accedió a los informes de diez consultoras, de las cuales siete dan ganador a Milei y tres a Massa, aunque siempre «dentro de los márgenes de error», lo que hace imposible una conclusión que supere el supuesto «escenario abierto».
¿Qué quiere decir esto? «Nada», confesó la consultora Analía Del Franco, en conversación con esta periodista. Explicó que «no hay ninguna forma de anticipar cómo votará ese margen de 10 por ciento de la población que no sabe su voto, donde se definirá la elección. Habrá que esperar el debate», que se realizará este domingo 12 noviembre, una semana antes de la elección.

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