Drones suicidas chinos CH-901 controlado por inteligencia militar
Inteligencia Artificial y «enjambre de drones suicidas», la fórmula de China para imponerse a EE.UU.
Xi Jinping ha dado órdenes de mejorar las capacidades estratégicas de China en áreas emergentes
El régimen chino liderado por Xi Jinping esta empeñado en mejorar sus «capacidades estratégicas de combate» impulsándose en dos pilares interrelacionados entre si: Inteligencia Artificial y aviones no tripulados.
Tras la sesión anual conjunta de los máximos órganos de gobierno de China, se acordó, a instancia de Xi, «profundizar la reforma estructural de las industrias de ciencia y tecnología relacionadas con la Defensa acelerando el suministro de nuevas capacidades de combate de calidad».
Xi, también secretario general del Comité Central del Partido Comunista de China y presidente de la Comisión Militar Central, pidió a las fuerzas armadas de China «forjar un sentido de misión más fuerte, profundizar las reformas y promover la innovación para mejorar integralmente las capacidades estratégicas en áreas emergentes».
Dron de reconocimiento armado KVD002 del Ejército Popular de Liberación de China
Lo clave en esta declaración es descifrar lo que entienden los militares y dirigentes chinos con «capacidades estratégicas áreas emergentes».
De acuerdo con la doctrina militar china, las capacidades estratégicas se refieren a los medios que pueden «moldear en gran medida la forma o el resultado de la geopolítica en tiempos de paz o los de un conflicto en tiempos de guerra».
Esta capacidades son entendidas como «un punto focal en la competencia de las principales potencias, desde el punto de vista en la guerra de alto nivel» explica el portal del Ejército de Liberación Nacional.
El régimen de Pekín espera que los avances en tecnologías, inteligencia artificial, equipos no tripulados y desarrollos relacionados desempeñen funciones estratégicas mayores que las funciones tácticas actuales, es decir que hagan una diferencia práctica en el campo de batalla en cuanto a minimizar el coste humanos y maximizar el alcance de los objetivos frente a contrincante.
De acuerdo con el legislador y dirigente comunista, Lü Yuncheng, China debería optimizar la estructura y configuración de su ejército, acelerar el desarrollo de fuerzas de combate no tripuladas dotadas de inteligencia artificial y promover la integración de fuerzas de combate de nuevo tipo en los sistemas de combate como fuerzas principales.
Los militares chinos están convencidos que las tecnologías no tripuladas y dotadas de inteligencia artificial están cambiando las reglas del combate, las operaciones conjuntas integradas se han convertido en la principal forma de guerra, y las guerras se librarán en múltiples dimensiones.
«Enjambre de drones»
El legislador militar Hao Jingwen, citado en un informe del PLA Daily, dijo que «las tecnologías de enjambre de drones en el aire, el mar y la tierra se han desarrollado y desplegado sucesivamente en conflictos regionales, por lo que China necesita darse cuenta del importante papel que las áreas emergentes y realizar investigaciones activas en campos como big data, Internet de las cosas y la Inteligencia Artificial, para poder ganar guerras futuras».
Precisamente, la Academia de Electrónica y Tecnología de la Información de China, dependiente de la Corporación del Grupo de Tecnología Electrónica de China, de propiedad estatal, ha realizado desde 2020 sucesivas pruebas en un sistema de enjambre de drones de ala fija y el Ejército chino parece avanzar a grandes pasos para dominar esta tecnología.
El enjambre de drones es un concepto que implica la operación simultánea y coordinada de una gran cantidad de drones contra los que podría resultar muy difícil defenderse
Capaz de desplegarse desde tierra, mar y aire, «esta nueva herramienta podría desempeñar un papel vital en misiones desafiantes, incluidas operaciones de desembarco anfibio» explica Ordnance Industry Science Technology, una revista de defensa con sede en Xi'an.
Durante las pruebas realizadas hasta ahora, los drones fueron lanzados desde plataformas de 48 unidades ubicados en camiones y desde helicópteros en el aire. Los drones se desplegaron rápida y simultáneamente mientras las plataformas de transporte estaban en movimiento, y el sistema puede lanzar hasta 200 drones de una sola vez.
Después de ser liberados, los drones cambiaron entre diferentes formaciones y llevaron a cabo misiones de reconocimiento y ataque en objetivos terrestres, según el informe.
Los drones vistos parecen ser los CH-901 de fabricación nacional de China, que miden aproximadamente 1,2 metros de largo y tiene una velocidad máxima de 150 kilómetros por hora y un radio de combate de 15 kilómetros.
Los avances de China frente a la todavía superioridad militar estadounidense no ha sido sólo una tarea militar, sino científica, industrial y política que está llevando los posibles escenarios de guerra a unas dimensiones inimaginables.
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