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26 de abril de 2024

Shlomo Perel, en una imagen de archivo

Shlomo Perel, en una imagen de archivoAFP

Shlomo Perel (1925-2023)

El superviviente del Holocausto que inspiró la aclamada película 'Europa, Europa'

Se hizo pasar por un joven alemán para escapar de los campos de exterminio. Las peripecias de la guerra le condujeron a enrolarse en las Juventudes Hitlerianas. Su historia fue llevada al cine en 1990 en el film Europa, Europa

Shlomo Perel
Nació en Peine, Alemania, el 21 de abril de 1925, y falleció en Givatayim, Israel, el 2 de febrero de 2023

Shlomo Perel

Tras la invasión alemana, fue capturado en 1941 por los nazis, por lo que asumió una identidad de etnia alemana. Acto seguido, Shlomo Perel fue reclutado por el Ejército alemán como traductor y luego enviado a un campamento de las Juventudes Hitlerianas. Después de la liberación, se reunió con su hermano, que había sobrevivido a Dachau. Emigró a Israel, participando en 1948 su guerra de independencia.

Shlomo Perel nació en Alemania en 1925, en la ciudad de Brunswick, en el seno de una familia hebrea. Los nazis subieron al poder cuando él contaba con ocho años de edad. Tras el empeoramiento de la situación de los judíos en Alemania –los nazis destruyeron la tienda de su padre y a él lo expulsaron de la escuela–, la familia decidió mudarse en 1936 a Polonia, a la ciudad de Lodz.
Con el estallido de la Segunda Guerra Mundial, la familia decidió que separándose tendrían más posibilidades de sobrevivir. Shlomo y su hermano Isaac dejaron a sus padres y hermana y escaparon más hacia el este; hacia territorios controlados por la URSS.
En una película del memorial del Holocausto Yad Vashem, Perel narra el momento en que vio a sus padres por última vez: «Mi padre rezó y dijo: 'Shlomo, pase lo que pase, sigue siendo judío. Cree siempre en Dios y él te protegerá. No olvides quién eres'. Mi madre simplemente dijo: 'Ve, tienes que vivir'. Yo tenía 14 años».
Shlomo e Isaac fueron llevados a un hogar para niños huérfanos situado en la actual Bielorrusia. Con el avance de la invasión alemana, Shlomo fue capturado en 1941. Para sobrevivir, ocultó su origen judío haciéndose pasar por un alemán étnico nacido en Rusia –sus padres habían llegado desde Rusia a Alemania en 1918, por lo en su hogar se hablaba perfectamente tanto alemán como ruso–. «Un oficial me registró. Cogí seguridad y le dije en alemán de la calle: ¡Ves!, no tengo armas. Me miró fijamente y me preguntó si era judío. Sabía perfectamente que si decía la verdad sería asesinado allí mismo. Tuve que elegir entre mi padre, que me dijo 'siempre sé judío', y mi madre, que me dijo 'debes vivir'. Por suerte prevaleció la voz de mamá y dije: 'No, soy alemán'», cuenta en sus memorias. Adoptó en ese momento el nombre de «Josef Perjell».
Dentro del Ejército alemán ejerció de traductor con prisioneros de guerra rusos, incluyendo labores de intérprete para el hijo de Stalin, Yakov Dzhugashvili, quien había sido hecho prisionero por los nazis. Tras pasar un año en el frente oriental, fue enviado a un internado de las Juventudes Hitlerianas en Braunschweig. De ahí regresó de nuevo al Ejército alemán, ya en en calidad de soldado.
«Era esquizofrénico», recordaría años mas tarde Perel. «Durante el día, era un joven alemán que quería ganar la guerra, cantaba canciones contra los judíos y gritaba 'Heil Hitler', y por la noche, en la cama, lloraba de añoranza por mi familia».
Terminó la guerra bajo cautiverio estadounidense. Tras su liberación, se reunió con su hermano, que había sobrevivido a Dachau. Descubrieron entonces que su padre había muerto de hambre en el gueto de Lodz, que su madre fue gaseada en un camión y que su hermana fue fusilada en una de las marchas de la muerte.
Perel se convirtió en traductor para el Ejército soviético antes de emigrar a lo que por entonces era el mandato británico de Palestina. Luchó en 1948 en la guerra de independencia de Israel. Su vida finalmente recuperó la normalidad cuando se instaló en un barrio a las afueras de Tel Aviv, donde se convirtió en fabricante de cremalleras. Allí se casó con Dora, su esposa, nacida en Polonia.
Transcurridos los años publicó en 1989 sus memorias, tituladas Hitlerjunge Salomon. En su traducción al español llevaron por título Tú tienes que vivir. El libro fue adaptado a la gran pantalla en el aclamado film Europa, Europa de la directora de cine polaca Agnieszka Holland.
En 1999 recibió del Gobierno alemán la Cruz Federal al Mérito por sus esfuerzos en la promoción del entendimiento germano-israelí. Perel murió el pasado dos de febrero rodeado de sus nietos en su casa de Givatayim, cerca de Tel Aviv, en Israel. Tenía 97 años.
«El deseo de Shlomo Perel de vivir la vida al máximo y contar su historia al mundo fue una inspiración para todos los que lo conocieron y tuvieron la oportunidad de trabajar con él», ha señalado Simmy Allen, portavoz de Yad Vashem.
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