Cartas al director
Osakidetza y natalidad
Plenamente agradecido a uno de los mejores hospitales del Servicio Vasco de Salud (Osakidetza) por la exquisita atención que nos brindaron durante un parto, deseo empero manifestar algunos desconciertos.
En primer lugar, Osakidetza ya no usa el adjetivo ‘madre’ o ‘padre’ en sus formularios, sino ‘progenitor’ —‘gestante’ o ‘no gestante’—. La expresión, que incurre en sesgo de género —porque en castellano existe ‘progenitora’—, borra el concepto maternal, en tanto que la gestación es algo que solo las mujeres pueden hacer. ¿Qué es un supuesto feminismo sin féminas, pero con progenitores gestantes?
Por otra parte, mientras el Gobierno vasco aporta generosas ayudas mensuales a las nuevas familias —el doble que el de España—, en revisiones posteriores se nos consulta si deseamos anticonceptivos. Que un gobierno ayude económicamente a parejas que solo tienen una criatura — ¿no es para que tengan más?—, toda vez que su servicio de salud les hace una propuesta anticonceptiva en un territorio con una pírrica tasa de natalidad, resulta cuanto menos bipolar —a no ser que entiendan que las ayudas son solo para correr con gastos derivados del nuevo miembro de la familia, y por lo demás se pretenda que los padres (perdón, progenitores) sigan trabajando como si no tuvieran hijos.
Quizá lo que necesite Osakidetza —y en general, todo el Sistema Nacional de Salud— sea decantarse de una vez por un modelo social concreto, dirimiendo estas contradicciones en un nuevo Pacto Sanitario que blinde sobre todo a las familias y a los más vulnerables.