
Adherencias en las arterias provocadas por el colesterol
Salud
Investigadores españoles diseñan una nueva técnica para disminuir los niveles de colesterol en sangre
Este grupo de científicos proponen una alternativa innovadora y eficaz para prevenir la aterosclerosis, sin los efectos secundarios de los tratamientos tradicionales
Un equipo de investigadores liderados por la Universidad de Barcelona y la Universidad de Oregón (Estado Unidos) ha diseñado una nueva estrategia terapéutica, publicada en la revista Biochemical Pharmacology, que ayuda en la lucha contra la aterosclerosis causada por la acumulación de placas de lípidos en las paredes arteriales.
La investigación ha contado con la colaboración de Nathalie Pamir, del Instituto Knight Cardiovascular de la Universidad de Salud y Ciencias de Oregón, y ha recibido el apoyo de proyectos del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades (MICINN) y de los Institutos Nacionales de la Salud (NIH) de Estados Unidos.
Este plan se basa en el uso de las moléculas pinzas de polipurinas (PPRH) y consiste en la inhibición de la expresión de la proteína PCSK9. Dicho método facilita que las células capten el colesterol, evitando su acumulación en las arterias y sin llegar a causar los efectos secundarios de la medicación más habitual, que está basada en las estatinas.
El uso de las pinzas de polipurinas incrementan los niveles del receptor LDLR (aquella proteína que se encuentra en la superficie de las células y juega un papel crucial en la regulación de los niveles de colesterol en la sangre), lo que conlleva a una mayor captación de colesterina en el interior de las células, y así disminuyen sus niveles en circulación y el riesgo de aterosclerosis.El codirector de la investigación y miembro del Departamento de Bioquímica y Fisiología de la Universidad de Barcelona, Carles J. Ciudad, ha explicado que uno de los brazos de cada cadena de las polipurinas HpE9 y HpE12 se une de forma específica a secuencias de polipirimidinas de los exones 9 y 12 de la PCSK9, que es el proceso que permite inhibir la transcripción del gen y la acción del ARN polimerasa.
«Los resultados muestran que tanto HpE9 como HpE12 son muy efectivas en las células HepG2. HpE12 disminuye un 74 % los niveles de RNA de PCSK9 y un 87 % los de proteína. En el caso de los ratones transgénicos, una sola inyección de HpE12 disminuye los niveles plasmáticos de PCSK9 en un 50 % y los de colesterol en un 47 % al tercer día», ha añadido la catedrática y codirectora del estudio, Verónica Noé.
Los científicos también han señalado la existencia de otras aproximaciones terapéuticas para rebajar o bloquear la acción de PCSK9, como el silenciamiento génico con siRNA, los oligonucleótidos antisentido o la técnica CRISPR.
«Las pinzas de polipurinas, especialmente HpE12, son oligonucleótidos terapéuticos con muchas ventajas, como la estabilidad y la falta de inmunogenicidad, con un bajo coste de síntesis. Adicionalmente, esta aproximación basada en pinzas de polipurinas contra PCSK9 no supondría efectos secundarios como las miopatías descritas en el caso de estatinas», han concluido.