Isabel Moreno, autora de 'Cambio climático para principiantes'
Entrevista
Isabel Moreno: «La ganadería y la agricultura, si se adaptan, son claves para mitigar el cambio climático»
La autora de Cambio climático para principiantes aboga por concienciar a toda la sociedad para evitar «los peores escenarios»
Para Isabel Moreno, autora de Cambio climático para principiantes (Plan B), estamos hablando de «uno de los mayores retos para la humanidad».
La autora (Madrid, 1992), graduada en Física y con un máster en Meteorología y Geofísica y meteoróloga en el programa Aquí la Tierra, de TVE, asegura que el aumento de temperaturas está provocando «consecuencias preocupantes» en cada rincón del planeta, lo que debería llevarnos a actuar inmediatamente.
A través de su obra, pretende llamarnos a la acción a toda la sociedad, porque cree que todos podemos poner nuestro granito de arena por pequeño que sea.
–¿Por qué si hay calentamiento global y se afirma que el planeta se ha calentado, se dan fenómenos tan opuestos como Filomena o la borrasca Gloria?
–El calentamiento global no implica que cada día sea más cálido que como era hace décadas. Es algo bastante más complejo. Que el sistema climático se esté calentando no implica que desaparezcan los extremos fríos, sino que los veremos con menos frecuencia que los cálidos, tal como está ocurriendo.
Más veranos calurosos
–Este verano ha sido extremadamente caluroso, con varias olas de calor consecutivas y una sequía preocupante. ¿Cree que este tipo de veranos serán la tónica los próximos años?
–Los datos nos dicen que, para los españoles, el verano de 2022 ha sido el más cálido de nuestras vidas. Pero hay más, porque el calor no se traduce solo en que vayamos a sudar más, también tiene impactos en la salud, en la economía –recordemos, por ejemplo, que en algunos lugares se está recogiendo la uva antes de lo normal–. Sabemos que este tipo de veranos van a ser más frecuentes en el futuro. ¿Serán la tónica habitual? ¡Depende del escenario en el que nos queramos quedar! Pero, desde luego, que volveremos a vivir veranos parecidos a este y vamos a tener que tomar medidas para adaptarnos a ellos (climatización, horarios…), incluso lo van a tener que hacer quienes no quieran creer que el calor de ahora no es el de hace unas décadas o que no es tan peligroso.
–¿Es el cambio climático una verdad incómoda o exagerada?
–Incómoda no. Incomodísima. No solo por las cosas que están pasando o las que van a pasar, sino por las medidas que tenemos que adoptar para mitigar efectos peores. ¿Exagerada? Depende de con quién hables porque, como en todo, siempre vas a encontrar a alguien que exagere las cosas. Pero no es lo mismo consultar la información en una revista «que te compras en un quiosco» que en una científica o en los informes del IPCC (Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático). De hecho, hay estudios que apuntan a que incluso en esas últimas publicaciones científicas, lejos de caer en catastrofismos, se tiende a ser bastante cauto…
–2021 ya fue un año de fenómenos extremos en España, ¿qué influencia tiene el cambio climático para explicárnoslo?
–Para el volcán de la Palma, ninguna. Son procesos que no están relacionados. Ahora bien, ¿el volcán de la Palma ha podido contribuir a emitir más gases de efecto invernadero a la atmósfera? Los ha emitido, pero su contribución junto con la de todos los volcanes del planeta ahora mismo es insignificante comparado con la acción humana. Vayamos con Filomena… porque, como he comentado antes, ver «Filomenas» no contradice el cambio climático ni muchísimo menos. Entra dentro de lo esperable. Por otro lado, sus consecuencias fueron el resultado de varios factores sumados: una borrasca con tintes subtropicales que interaccionó con una masa de aire muy frío que estaba sobre la península Ibérica. Todavía hay que seguir investigando para ver si este tipo de interacciones son más probables con el cambio climático o fue fruto de la casualidad.
–¿Cree que su hija a la que dedica la primera página del libro verá un mundo peor que el actual, climatológicamente hablando?
–¡Espero que vea algo parecido a lo que estamos viendo nosotros ahora! El futuro no está escrito y aún podemos evitar los peores escenarios. Hay que ser optimistas.
Una verdad «incomodísima»
–¿Qué cambios deberían introducir sectores que ya de por sí lo están pasando mal por otros factores como el de la ganadería o la agricultura para reducir sus emisiones de CO₂ y a su vez seguir siendo económicamente viables?
–Antes comentaba que el cambio climático es una verdad incomodísima, y este es uno de los puntos que justifican que haya dicho tal cosa. En primer lugar, estos sectores se van a ver amenazados por los efectos de cambio climático, por lo que van a tener que adaptarse a lo que va a venir –algunos ya lo están haciendo–. Por otro lado, también son unos sectores que juegan un rol importante en la emisión de gases y en los cambios en los usos del suelo, entre otros. Esto último hace que también sean sectores clave para mitigar el cambio climático. ¿Cómo cambiar exactamente? Tendríamos que estar horas y horas hablando del tema, ver cada caso particular… porque, evidentemente, no son los mismos retos a los que se va a enfrentar un pequeño ganadero o agricultor que quien gestiona una gran empresa multinacional y, desde luego, que no van a considerar lo mismo ser «económicamente viable»…
- ¿Considera entendible que haya quien encaje mal las recomendaciones que generalmente se le hace a la población para ayudar al clima cuando luego leemos noticias donde dos gigantes contaminantes como China o India ponen objeciones al objetivo de limitar el calentamiento global?
–Es completamente entendible, pero no solo por ese argumento que planteas, sino cuando miramos a nuestro alrededor y vemos a personas que viajan mucho más que nosotros, etc. Pero eso, por un lado, no debería justificar el inmovilismo. Por ejemplo, cuando estamos parados en el coche en un semáforo y el de al lado que va con un coche mucho más grande se lo salta, ¿lo hacemos también? No. Intentamos hacer bien las cosas e incluso criticamos que se haga mal. Además, no somos conscientes del poder que tenemos como sociedad, incluso si estos porcentajes no se suman. Mi libro termina precisamente con esto a través de una cita de Eduardo Galeano: «Mucha gente pequeña, en lugares pequeños, haciendo cosas pequeñas, pueden cambiar el mundo» porque sí, podemos parecer pequeños… pero somos un montón de personas y podemos evitar los peores escenarios que se plantean en cuanto a este tema.
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