Otro hábito perjudicial es dejar que el móvil se apague por completo antes de volver a cargarlo
Dispositivos
Este es el mejor momento para cambiar de teléfono móvil
Uno de los errores más habituales es usar cargadores genéricos o no certificados, que pueden provocar sobrecargas y reducir la capacidad de la batería
Tras el apagón que se produjo el pasado lunes 28 de abril, la sociedad ha tomado conciencia de lo profundamente marcada que está por el consumo inmediato y las constantes innovaciones tecnológicas. De hecho, los teléfonos móviles se han convertido en uno de los objetos que más rápidamente se reemplazan, ya que no es raro que se cambien por otros cada dos años.
En este contexto, la empresa Certideal, especializada en la comercialización de los dispositivos móviles reacondicionados, ha analizado esta tendencia y propone un enfoque alternativo, que es dar una segunda vida a los móviles y alargar su uso más allá de los cinco años, siendo este el momento idóneo para cambiar de teléfono.
Concretamente, la investigación que han llevado a cabo revela no solo las causas más comunes del reemplazo prematuro, sino también prácticas cotidianas que, sin saberlo, aceleran el deterioro de nuestros dispositivos.
Entre los principales motivos de sustitución destacan el mal funcionamiento, la pérdida de rendimiento de la batería, los daños físicos y la atracción por las novedades tecnológicas. Sin embargo, lo cierto es que muchos de estos problemas se podrían evitar si adoptamos ciertos cuidados básicos.
Los errores más extendidos
Uno de los errores más comunes es el uso de cargadores genéricos o no certificados, que pueden provocar sobrecargas eléctricas y reducir significativamente la vida útil de la batería. Otro hábito perjudicial es dejar que el móvil se apague por completo antes de recargarlo, ya que este comportamiento también contribuye a acortar su durabilidad.
Realizar pequeñas reparaciones, como sustituir una batería desgastada o cambiar una pantalla dañada, puede devolver al teléfono buena parte de su funcionalidad original. Además, mantener el sistema operativo actualizado y eliminar aplicaciones innecesarias contribuye a mejorar su rendimiento.
Finalmente, más allá del ahorro económico que supone alargar la vida útil de nuestros móviles, esta práctica también tiene un importante impacto medioambiental. Al optar por reparar, reutilizar o donar nuestros dispositivos en lugar de reemplazarlos constantemente, contribuimos a reducir la demanda de nuevos recursos naturales, disminuimos la huella de carbono asociada a su fabricación y ayudamos a frenar el ritmo del consumo desmedido.
