
Una de las cámaras de navegación del Perseverance de la NASA capturó las huellas del rover provenientes de un área llamada «Witch Hazel Hill», el 13 de mayo de 2025
Ciencia
El rover Perseverance explora una zona con las rocas más antiguas de Marte: «Es un torbellino geológico»
Esta región, que podría albergar algunas de las rocas más antiguas del planeta, representa una frontera geológica entre los estratos más antiguos del borde del cráter y los más jóvenes de las planicies exteriores
El vehículo explorador Perseverance de la NASA ha comenzado a investigar una nueva zona en la ladera occidental del cráter Jezero, en Marte, denominada «Krokodillen». Esta región, que podría albergar algunas de las rocas más antiguas del planeta, representa una frontera geológica entre los estratos más antiguos del borde del cráter y los más jóvenes de las planicies exteriores. Según los científicos, Krokodillen podría ofrecer importantes claves sobre los primeros tiempos del planeta rojo.
Ken Farley, científico adjunto del proyecto Perseverance en el Instituto de Tecnología de California (Caltech), destacó el potencial de este enclave: «Los últimos cinco meses han sido un torbellino geológico. A pesar del éxito de nuestra exploración de Witch Hazel Hill, nuestra investigación de Krokodillen promete ser igual de convincente».
El área recibe su nombre en honor a una cordillera noruega ubicada en la isla de Prins Karls Forland y abarca cerca de 30 hectáreas de afloramientos rocosos situados en una pendiente al suroeste de Witch Hazel Hill. Análisis preliminares realizados desde la órbita habían identificado presencia de arcillas en el lecho rocoso de la zona. Estas formaciones minerales, que se originan en presencia de agua líquida, podrían contener información esencial sobre la habitabilidad del Marte antiguo y sobre condiciones favorables para la preservación de compuestos orgánicos.
Farley subraya la relevancia del hallazgo potencial: «Si encontramos una posible biofirma aquí, lo más probable es que sea de una época completamente diferente y mucho más temprana de la evolución marciana que la que encontramos el año pasado en el cráter de las 'Cataratas Cheyava'». Por su parte, datos recabados por orbitadores de la NASA indican que las zonas periféricas de esta región también podrían contener minerales como olivino y carbonatos.
Actualmente, el Perseverance, que el pasado 9 de mayo alcanzó los 1.500 días de actividad en la superficie marciana, se encuentra analizando un afloramiento rocoso de Krokodillen llamado «Copper Cove», donde se cree que podrían hallarse rocas del período Noeico.
En paralelo, la misión ha adoptado una nueva estrategia de muestreo. El equipo ha decidido dejar algunas muestras sin sellar para poder descartarlas en caso de encontrar elementos geológicamente más relevantes. Hasta ahora, el rover ha recogido 26 núcleos de roca, de los cuales ha sellado 25, además de dos muestras de regolito, tres tubos testigo y una muestra atmosférica. La única muestra sin sellar corresponde a un núcleo extraído el 28 de abril en un punto bautizado como «Bell Island», que contiene esférulas, pequeñas piedras redondeadas.
Katie Stack Morgan, científica interina del proyecto en el Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL) de la NASA, defendió esta medida: «Llevamos más de cuatro años explorando Marte, y cada tubo de muestra lleno que llevamos a bordo tiene una historia única y fascinante que contar. Quedan siete tubos vacíos y mucho camino por recorrer, así que por ahora dejaremos algunos tubos sin sellar, incluido el que contiene el núcleo de Bell Island. Esta estrategia nos permite máxima flexibilidad mientras continuamos nuestra recolección de muestras de rocas diversas y fascinantes».