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Rodrygo, durante el partido ante el Espanyol

Rodrygo, durante el partido ante el EspanyolEuropa Press

Rodrygo tiene todo lo que pide, porque Xabi Alonso está empeñado en recuperar su mejor versión

Rodrygo Goes juega por fin donde le gusta, en su séptima temporada en el Real Madrid. En Brasil destacaba con sus incursiones y regates por la izquierda. Por eso fue fichado. Pero Vinicius había llegado un año antes al equipo blanco y le había quitado ese puesto. El chaval de Osasco tuvo que reinventarse y jugar por la derecha. Lo hizo muy bien, porque su clase es innata. Tan bien lo hizo que Ancelotti le otorgó la titularidad como tercer punta rompiendo su anhelo táctico de plantear un esquema con cuatro centrocampistas. Rodrygo defendía y cubría esa doble misión.

Cuando Vinicius no estuvo, Rodrygo tomó el flanco zurdo y siempre hizo de cine. Fue una demostración clara de lo que desearía. Tuvo que regresar a la derecha en cuanto su compatriota reaparecía. En ese flanco diestro fue titular hasta la final de Copa del curso pasado, cuando Ancelotti no tuvo más remedio que quitarle después de unos meses sin rendir con la eficacia de antes. Un problema anímico se sumó a esa situación futbolística para dejarle en el banquillo.

Xabi Alonso también le pasó a la suplencia tras su primer partido como titular en el Mundial de Clubes. Rodrygo 'no estaba'. Y pasó a estar en el mercado. El joven brasileño, 24 años, no quiso marcharse. Quería triunfar definitivamente en el Real Madrid. Y habló claro con Xabi Alonso. Por primera vez habló y pidió al Real Madrid lo que quería: ser protagonista por la izquierda. Dicho y hecho.

El entrenador le ofreció todo lo que el muchacho pedía porque el futbolista fue muy sincero: sus mejores virtudes las demuestra desde la banda izquierda y para dar lo mejor al Real Madrid necesita jugar ahí.

Hay que hablar claro: el descenso en el nivel de Vinicius, que también hizo un mala temporada en el curso anterior, ha permitido que el nuevo técnico ofrezca oportunidades a Rodrygo por esa banda. El Vinicius estelar de hace un año lo habría impedido. Pero Vini no está tan fino como antes, busca también recuperar su mejor estado de forma, y en esa diatriba el máximo responsable del plantel ha optado por dar partidos a los dos en el mismo sitio y generar una competencia que es buena. El enfado de Vinicius frente el cuadro españolista por ser sustituido en el minuto 77 por Rodrygo no tenía sentido. Casi 80 minutos en el campo y hay partido el martes. Mientras Vini se ofusca, Goes admite la rotación.

El mensaje del entrenador es clarividente: quiere recuperar el mejor rendimiento de los dos. Desea recuperar al mejor Rodrygo y tiene que jugar donde le gusta. Y la competitividad debe suscitar el retorno del mejor Vinicius. Bendito problema sería para el guipuzcoano.

Rodrygo está contento por jugar

Goes aplaude esa decisión de su jefe, que ha sido valiente al tomarla y compartir los minutos entre ambos, otrora titulares indiscutibles. Rodrygo siempre quiso tener su oportunidad por la izquierda en el Real Madrid y ahora puede disfrutarla, aunque haya que competir con su paisano. Se siente bien, a gusto, sobre todo después de sufrir todo lo que sufrió durante la campaña pasada, tanto a nivel deportivo como personal. Ha jugado todos los encuentros de esta temporada. En cuatro salió en los segundos tiempos y ha sido titular en dos, pero jugó de inicio en la Champions y eso es un dato que le dio mucha moral.

Observa que el entrenador cree en él. Lo cierto es que desde que juega por la izquierda ha ofrecido muy buenas prestaciones. Ha vuelto a ser el Rodrygo resolutivo y peligroso. El técnico ha destacado que ha tenido mala suerte en los remates porque varios debieron ser gol, pero ha recuperado su verticalidad, su agresividad penetrando en el área con la pelota controlada. Así provocó el claro penalti ante el Olympique de Marsella que Mbappé transformó en el primer gol madridista en esta Copa de Europa.

Rodrygo Goes, durante un partido la temporada pasada con el Real Madrid

Rodrygo Goes, durante un partido la temporada pasada con el Real MadridGTRES

La verdad es que Alonso demuesra ser un jefe con mucha autoridad. Dijo desde el primer día que no se casaba con nadie y lo ha confirmado con hechos. Está cambiando bastantes cosas en el juego del equipo y en los roles de los futbolistas, que deben adaptarse a una nueva realidad. La pérdida de la titularidad fija de Vinicius y el trato igualitario con Rodrygo son posiciones, realidades, que el preparador ha explicado y que los profesionales deben asimilar. Asegura el vasco que esa medida busca que todos sus hombres tengan minutos, se sientan partícipes, que todos estén implicados y se consideren válidos, que forman de verdad parte de su sistema.

Los argumentos son visibles, se hacen visibles. Rodrygo compite con Vinicius como Mastantuono pelea con Brahim por el puesto de la derecha del ataque. Como Carvajal lucha con Trent por el lateral. La diferencia es que Vinicius era indudable con Ancelotti y ahora Rodrygo le discute el rango. Los dos van a jugar constantemente y mucho. Se van a repartir los minutos. Rodrygo acepta la apuesta para demostrar su mejor nivel. Se está reencontrando en el césped. Es un paso adelante. Bueno para el Real Madrid.

Tres años de contrato para consolidarse

Goes llegó hace seis años a la casa blanca y su progresión fue espléndida. Los goles ante el Manchester City y el Chelsea le catapultaron a la cima hace tres años. Fue el revulsivo determinante en la consecución de la Décimocuarta Champions. Guardiola se enamoró del chaval. A partir de entonces comenzó a ganarse una titularidad que perduró hasta hace unos meses.

Suma 274 encuentros con el Real Madrid, en los que ha marcado 68 goles y ha dado 47. Tiene tres años más de contrato y quiere consolidar su carrera en el club. Este verano vivió una situación especial. O se marchaba a hacer carrera en otro sitio o confirmaba su búsqueda del mejor nivel en el Real Madrid. Eligió continuar en su equipo. Se siente madridista. Bueno para el Real Madrid.

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