Fundado en 1910

19 de mayo de 2024

El consejero delegado de Telefónica, Ángel Vilá Boix (izda.), y el presidente de Telefónica, José María Álvarez-Pallete.

El consejero delegado de Telefónica, Ángel Vilá Boix (izda.), y el presidente de Telefónica, José María Álvarez-Pallete.Marta Fernández / Europa Press

Telefónica se reúne de urgencia con los saudíes para conocer sus intenciones

Si no perciben la rentabilidad esperada, podrían intentar influir en la gestión de la empresa

El presidente de Telefónica, José María Álvarez-Pallete, y el consejero delegado, Ángel Vila, viajaron ayer a Arabia Saudí para reunirse con Saudi Telecom Company (STC) y conocer así de primera mano su intención al comprar el 9,9 % de la compañía española.
La adquisición del porcentaje de la teleco española puede ser bueno o malo. Como recuerda el profesor de la escuela de negocios IESE José Ramón Pin Arboledas, STC es propiedad del Estado saudí, que es consciente de que sus ingresos por el petróleo terminarán algún día y busca el modo de sustituirlos. La inversión en Telefónica va en este sentido, y los árabes han dicho que «no pretendemos tomar el control salvo que no se cumpla la rentabilidad que esperamos. El día que entren en dificultades, actuarán llevando a cabo, entre otras medidas, su entrada en el consejo de administración para orientar el futuro de la compañía a largo plazo». de momento los saudíes han dicho que «es pronto» para hablar sobre esa posibilidad.
El fondo soberano saudí, principal accionista de STC, persigue inversiones rentables a largo plazo para mantener la paz social en su país, pues no hay que olvidar que Arabia Saudí es una autocracia. En este sentido no pondrá problemas mientras su inversión le devuelva los dividendos que espera, pero si no lo hace, puede haberlos.
Por ese motivo han hecho bien Álvarez-Pallete y Vila en viajar a Arabia Saudí para hablar con los compradores, aunque en ambientes empresariales se piensa que la entrada de los saudíes por sorpresa ha mostrado una falta de diligencia por su parte, al igual que por parte del Gobierno, al que las cuestiones políticas relacionadas con la investidura han conducido a que no se enterara de lo que estaba ocurriendo.
Telefónica podría dudar de que vaya a defenderle el Gobierno, teniendo en cuenta su escaso aprecio mostrado hacia las grandes empresas. Tampoco en nuestro país ha habido buenos ejemplos en esta línea en los últimos años, como se vio con la conversión de Endesa en una empresa italiana.
STC ha aprovechado para entrar en Telefónica en un momento en el que su acción está muy barata (3,75 euros al cierre del martes), y también el Ibex (por debajo de los 9.500 puntos). En este contexto Pin Arboledas piensa que «el saneamiento financiero que ha llevado a cabo Álvarez-Pallete ha sido bueno para el dividendo del accionista, pero discutible para el crecimiento del valor». El hecho puede tener su impacto en la rentabilidad que buscan los saudíes a largo plazo, y determinar en ellos un cambio de actitud si lo estiman conveniente.
De momento las declaraciones de una y otra empresa no hacen pensar para nada en que la relación no vaya a ser amistosa y de colaboración. Los saudíes afirman confiar en la compañía y en su modelo de negocio, su tecnología y sus gestores.

Temas

Comentarios
tracking