Captura del editorial del Financial Times
Financial Times reprende a Sánchez: «No reconoce la capacidad de su propio lado para escupir bilis»
El medio británico lanza una dura crítica contra el discurso del presidente del Gobierno en el que atacó a la derecha
El discurso de Pedro Sánchez de este lunes para anunciar si dimitía o se mantenía en el poder traspasó fronteras y no cayó en saco roto. En Reino Unido recibió una dura crítica. El Financial Times (FT) publicó un editorial horas después en el que le acusa de «hiperpersonalizar» la política e ir de «víctima» por las presuntas acusaciones de corrupción surgidas contra su mujer cuando, reflexiona el medio, Sánchez no es capaz de «reconocer la capacidad de su propio lado para escupir bilis».
El medio británico denunciaba así la falta de autocrítica del presidente y puso de relieve la incoherencia que el líder del Ejecutivo español ha mostrado y muestra acerca de su pretensión de ser el líder de la «regeneración democrática» en el país, para acabar con la «difamación, la falsedad y el odio», cuando en su discurso no dejó de descargar la responsabilidad de la que llama «máquina del fango» en los partidos de derechas, PP y Vox.
Unas acusaciones por parte de Sánchez que el FT ha lamentado porque, consideran, solo sirven para ampliar «el abismo político» en el país.
Además, el medio aprovechó para hacer un repaso de las reacciones del ámbito político y periodístico al discurso de Sánchez más destacadas para argumentar su negativa conclusión sobre la actuación del presidente. Para ello rescató lo dicho por, entre otros, el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, el ex presidente del Ejecutivo, José María Aznar, el ex socio de Sánchez, Pablo Iglesias o el profesor de economía de las escuela de Económicas de Londres, Luis Garicano.
«Ahora es probable que España se vea consumida por un debate aún más malhumorado sobre si Sánchez es víctima de una injusticia, como se presentó, o el narcisista corrupto que perciben sus oponentes», lamenta el medio, quien tampoco desaprovechó la ocasión para resaltar el estancamiento político del Gobierno y su débil poder. «La legislación ha estado prácticamente paralizada durante meses en España excepto por el impulso de Sánchez para aprobar un proyecto de ley de amnistía para los separatistas catalanes involucrados en un intento ilegal de 2017 de separarse de España, el precio que está pagando por su apoyo parlamentario», concluye.
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