Los Reyes, la Princesa de Asturias y de Gerona, y la Infanta Sofía, en Gerona el pasado julio
Casa Real Los Reyes se esfuerzan por abrir Cataluña a España en plena campaña electoral
Don Felipe y Doña Letizia presiden la próxima semana por primera vez en Madrid los actos públicos de la Fundación Princesa de Gerona
Mientras la mayoría de los españoles asisten atónitos a la campaña electoral de Cataluña, en la que se prometen con toda naturalidad referendos ilegales de independencia ante la indiferencia del Gobierno de Pedro Sánchez, la próxima semana Cataluña mostrará un rostro muy distinto en Madrid.
Por primera vez en su historia, la Fundación Princesa de Gerona celebrará sus actos públicos en la capital española, donde serán presididos por los Reyes. Este lunes será la Reina la que asista al concierto EmocionArte en el Teatro Real de Madrid, que reunirá por primera vez a más de una veintena de artistas emergentes nacionales e internacionales, del pop a la lírica, comprometidos en transformar el mundo a través de su música. Y el martes el Rey presidirá en La Nave la proclamación del Premio Princesa de Gerona Internacional 2024, en las categorías de empresa e investigación.
La parada en Madrid forma parte del tour del talento que ha llevado a la Fundación Princesa de Gerona a recorrer Lérida, con más de 5.000 participantes; Salamanca, con más de 6.000; Cádiz, con más de 7.000 participantes, y Santander.
Una España que decidió sumar, no restar
La Fundación Princesa de Gerona nació hace 15 años en la residencia de Zarzuela de los entonces Príncipes de Asturias y de Gerona, a iniciativa de la sociedad civil gerundense, al margen de las instituciones políticas. Surgió como «un proyecto integrador para una España que decidió sumar y no restar ni dividir» y su objetivo, desde entonces, es acompañar a los jóvenes y ayudarles en su desarrollo personal y profesional para que ellos contribuyan a hacer un mundo mejor.
La fundación está entregada a su labor social en beneficio de los jóvenes, y en sus actos se habla de talento, de igualdad de oportunidades, de cultura y educación, de superar barreras, de valores y de cómo emprender y transformar el mundo.
Del apoyo al ataque
Al principio, el separatismo respaldaba a la Fundación Princesa de Gerona. Incluso, antes de caer en la delincuencia, Carles Puigdemont acompañaba a Don Felipe y Doña Letizia en Gerona durante la entrega de los premios de la fundación. En aquellos tiempos, Puigdemont era vicepresidente de honor de la fundación, cuya presidenta es la Princesa de Asturias y de Gerona.
Pero cuando el independentismo se radicalizó y empezó a saltarse las leyes, intentó también asaltar la Fundación Princesa de Gerona y cambiarle el nombre. Como no pudieron, empezaron a boicotearla: las autoridades dejaron de asistir a sus actos, se negaron alquilarle los auditorios espacios públicos y enviaron a los CDR para amedrentar a premiados y asistentes y reventar los premios.
Quince años después, la Fundación Princesa de Gerona ha resistido todos los ataques y ha mantenido su compromiso y el espíritu con el que se creó. A pesar de las dificultades, la fundación sigue mostrando al mundo esa otra Cataluña posible de la que habla el Rey y que es «una Cataluña de todos y para todos», una «tierra de acogida, inclusiva e integradora, respetuosa con la diferencia, abierta y plural». Una Cataluña que se engrandeció a si misma y a España, pero de la que el separatismo no quiere ni oír hablar porque tendrían que reconocer que antes del proceso independentista todo iba y era mejor.
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