
De izquierda a derecha, Juan , Simoneta, Bruno, Beltrán y Fernando Gómez Acebo, hijos de Pilar de Borbón
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Los graves problemas con Hacienda de los hijos de la Infanta Pilar
Sus cinco hijos se hicieron cargo tras su muerte de un patrimonio que el Ministerio de Hacienda puso sobre la lupa
La Infanta Pilar de Borbón falleció el 8 de enero de 2020 debido a un cáncer colorrectal. La noticia de su muerte fue anunciada por su hermano, el Rey Juan Carlos I de España. La Infanta Pilar tenía 83 años en el momento de su fallecimiento. Su funeral se llevó a cabo en el Monasterio de El Escorial.
La duquesa de Badajoz tuvo cinco hijos con su esposo, Luis Gómez-Acebo y Duque de Estrada, con quien se casó el 5 de mayo de 1967: Simoneta, Juan, Bruno, Beltrán y Fernando. Tras su muerte, los descendientes de la infanta han sido los encargados de gestionar la fortuna familiar que incluía mansiones, empresas, joyas y un rico mobiliario histórico. El reparto de la herencia se hizo en la más estricta intimidad, aunque trascendió que algunos enseres personales de la prima de Don Felipe fueron donados a la asociación Nuevo Futuro, de la que era presidenta de honor.
Pero, ¿de dónde viene esta herencia millonaria? Doña Pilar recibió un total de 131,4 millones de pesetas de la herencia de su padre, don Juan, un alto valor económico que terminó en Nueva York por indicaciones de su marido.
Una de las primeras decisiones que tomaron los hermanos fue poner a la venta los bienes inmuebles, ya que eran propiedades muy costosas de mantener. Se trata de la casa familiar de Puerta de Hierro (Madrid), donde los vástagos se han criado, y el chalé familiar de Mallorca donde pasaban todos los veranos y que sirvió de refugio a los exduques de Palma durante su intervención en el juicio de Nóos. También había un piso de grandes dimensiones en la calle Velázquez de Madrid, una de las zonas con mayor poder adquisitivo de la capital, y un pequeño inmueble en la calle Mayor.Todas las propiedades se gestionaban a través de la sociedad patrimonial San Jacobo S.L., que Luis constituyó en la década de los 60 y de la que Pilar fue administradora única hasta el día de su muerte. Después, la gestión de la empresa corrió a cargo de los hijos. Simoneta figura como presidenta de la entidad, y el resto de hermanos, como consejeros. Además, se abrió paso a uno de sus primos, Alejandro Fernández de Araoz Gómez-Acebo, que entró como secretario.

La Infanta Doña Pilar de Borbón, en una imagen de archivo
El objetivo principal de San Jacobo S.L. era «la compraventa y alquiler de inmuebles y terrenos por cuenta propia y la administración, gestión y desarrollo del propio patrimonio». Sin embargo, con la sociedad heredaron los problemas de la misma con Hacienda que tenía abierta una inspección por indicios de irregularidad sobre el Impuesto de Sociedades (IS) y el IVA de los años 2012 y 2013. Como respuesta, la empresa recurrió ante el Tribunal Económico Administrativo (TEAR), mientras presentaban el resultado de la acumulación de pérdidas de ejercicios anteriores. En el año 2021 el TEAR dictó resolución parcialmente estimatoria en relación a la reclamación económica.
Lo que parecía ser una luz, no lo fue. En el año 2022 la Agencia Tributaria continuó con la inspección que también fue recurrida ante el TEAR de MADRID. Pero en mayo de 2023 se emite otra resolución y se lleva a acabo un acuerdo de ejecución de resolución económico-administrativa por «falta de motivación de liquidación». Es decir, se desconoce la razón por la que Hacienda le exige la deuda tributaria, y por lo tanto no se pueden plantear argumentos o alegaciones en contra
El último balance de cuentas presentado por la empresa San Jacobo SL en el registro es del año 2022 y refleja un rango de Capital Social de 3.100 a 60.000 euros.