Carolina Marín, en una imagen de archivo
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Carolina Marín, la campeona de bádminton que la Reina Letizia quería de profesora para sus hijas
La campeona olímpica, mundial y europea de bádminton, ha sido galardonada con el Premio Princesa de Asturias de los Deportes 2024
Más allá de la importancia de estos galardones para la heredera al trono español, la Princesa Leonor, el Premio Princesa de Asturias de los Deportes tiene otros grandes protagonistas: sus ganadores. Un honor que esta edición recae en Carolina Marín, la jugadora onubense. Contando las semanas para que tenga lugar la ceremonia de entrega en Oviedo, con fecha para el 25 de octubre, repasamos los detalles de la vida íntima de la deportista: de los inicios de su carrera deportiva a su nueva faceta como creadora de contenido y su historia de amor con el atleta Gen Esteban.
Carolina Marín nació en Huelva el 15 de junio de 1993. A los tres años, su madre, Antonia Martín, que era una sencilla bailaora flamenca, la apuntó a clases de flamenco en la Asociación de Vecinos del barrio para hacer del baile su pasión. Pero a los 8 descubrió el bádminton gracias a su amiga y vecina, Laura Sánchez, que le animó a probar este deporte en el Polideportivo que estaban al lado de su casa.
Desde ese momento, no volvió a separarse de una raqueta. Su padre era el que la acompañaba a los partidos. Así, su vocación por este deporte de competición comenzó desde la infancia, inscribiéndose en diferentes torneos. Haciéndose un nombre en el mundillo, ganó su primer trofeo a los doce años en unos juegos municipales y después fichó por el Club de Huelva. Su destreza fue tal que antes de los quince ya estaba viviendo en Madrid, concretamente en la Residencia Joaquín Blume de Madrid para deportistas de élite.
Sería en el 2014 cuando pasó a ocupar el número 4 del ranking mundial de bádminton y el número 1 de los torneos Super Series destronando de este título a la famosísima Li Xuerui. Una carrera con mucho éxito donde ha conseguido ser campeona olímpica en los Juegos de Río 2016, tres veces campeona mundial, campeona en los Juegos Europeos de Cracovia 2023, y siete veces campeona de Europa.
A Carolina, que tiene 30 años, todavía le siguen llamando «la niña», pero poco o nada queda ya de eso. En su carrera deportiva hay varios hitos importantes. Uno de ellos gracias a la Reina Letizia, que, en septiembre de 2014, tras ganar su primer título mundial, la recibió en la Zarzuela en una audiencia privada. En esta cita tuvo lugar una curiosa anécdota: le pidió el teléfono con la idea de llamarla para que diera clases de bádminton a la Princesa Leonor y la Infanta Sofía, que se habían vuelto fanáticas a ese deporte tras verla jugar. Aunque el deporte no es lo único en lo que ha triunfado Carolina.
Carolina Marín intenta llegar a golpear el volante en la final del Masters
Respecto a la faceta amorosa, en la actualidad, mantiene una sólida relación con el atleta de la Real Sociedad, Gen Esteban San Millán. Ambos han llevado su romance con discreción, aunque sí dejan rastro de su historia en las redes sociales, concretamente en Instagram donde publican imágenes juntos de vez en cuando.
Carolina también tiene una cuenta personal de Tik-Tok, donde publica algunos vídeos bailando juntos, mostrando además sus dotes para el baile. La pareja se muestra feliz siguiendo diferentes trends. Allí acumula más de 100.000 seguidores, haciendo las delicias de sus fans en vídeos en los que aparece solo, pero también junto a sus familiares y amigos. Mientras que en su perfil de Instagram muestra más fotografías de momentos relacionadas con el deporte y sus logros.
Carolina Marín, junto a su pareja Gen Esteban
Pero la deportista también ha vivido momentos duros. Ha sufrido varias lesiones importantes que han puesto en peligro su futuro deportivo: en enero de 2019 durante el máster de Indonesia, sufrió una rotura de ligamento cruzado, y tuvo que parar ocho meses, aunque volvió con fuerza y se hizo con el open de China. Una etapa difícil que se repetía de nuevo en mayo de 2021 con otra rotura de ligamento cruzado sumada a la de los meniscos interno y externo de su rodilla izquierda. De nuevo se recuperó y ganó su sexto campeonato de Europa.
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