Fundado en 1910

Cartas al director

Paz para Ucrania

Trump, desde su papel de opositor a Biden, proclamaba lo fácil que sería para él terminar con la guerra. En la práctica se está demostrando que no era así. Podemos suponer que Trump no vio la dificultad que tenía tratar y negociar con una persona como Putin y la manera rusa de llevar una guerra. Para los rusos una guerra es siempre a largo plazo, no conocen la guerra relámpago. Se trata de vencer al oponente por desgaste y sin importarle las pérdidas de soldados propios o ajenos.

Llevamos casi cuatro años de enfrentamiento y parece no tener fin. Las ganancias territoriales de Rusia son mínimas, pero el cansancio de la población ucraniana después de los ataques masivos de drones es mucha. El hastío de la población rusa lo desconocemos, pero debe ser alto por el número de muertos en el campo de batalla.

Putin lo quiere todo, no solo los territorios arrebatados por las armas a los ucranianos, sino también los que no han podido y eso no creo que se lo pueda tragar nadie. Amén de otras muchas peticiones imposibles de cumplir.

La Unión Europea aprobó sanciones contra Rusia, pero el problema está en que el nivel de cumplimiento por parte de los diferentes países europeos no ha estado a la altura requerida, por ejemplo, han seguido comprando petróleo ruso como nunca.

En cambio, Trump sí parece que ha dado con el punto débil de Putin. Ha hecho que el barril de petróleo haya caído por debajo de los 60 dólares. China con sus compras masivas ha detenido el desplome del crudo, pero Trump podría hacer que se hundiera y la economía rusa colapsaría. Por eso Putin va a negociar y posiblemente se preste a un acuerdo.

Luis Javier Cava

tracking

Compartir

Herramientas