Florentino Pérez y Joan Laporta
Real Madrid y Barcelona: ¿amigos o enemigos en los despachos?
Es la gran pregunta que se hace todo el mundo y que nos hacemos tras el abrazo de Joan Laporta con Al Khelaifi
Un gesto que implica que el Barcelona deja solo al Real Madrid en su proyecto de la Superliga
Real Madrid y Barcelona ¿Amigos o enemigos?¿Ha traicionado Joan Laporta a Florentino Pérez? Es la pregunta que se hace todo el mundo después de lo vivido en Roma con la presencia del presidente del Barcelona en la reunión de la UEFA con la nueva EFC; antigua ECA, y que reúne a los equipos más importantes de Europa. Joan Laporta apareció como las grandes estrellas, como invitado de excepción, y fundiéndose en un abrazo y ante los ojos del mundo entero con Nasser Al Khelaifi, presidente del PSG y de la propia EFC.
Un abrazo que esconde mucho más. Es un movimiento estratégico de Joan Laporta para acercar al Barcelona al resto de clubes de la EFC y un guiño a la UEFA. Un paso que implica además alejarse de la Superliga, el proyecto liderado por el Real Madrid y donde hasta ahora el equipo azulgrana había sido su compañero inseparable de Florentino Pérez. No había foto donde no estuviera el presidente azulgrana junto a su homónimo blanco.
Cuatro años y medio se cumplen desde que el presidente del Real Madrid presentó el proyecto de la Superliga. Fue un 18 de abril de 2021 y en él se embarcaron entonces doce clubes: Milán, Arsenal, Atlético de Madrid, Chelsea, Barcelona, Inter de Milán, Juventus, Liverpool, Manchester City, Manchester United y Tottenham Hotspur.
Pronto se empezaron a bajar del barco muchos de estos, empezando por los ingleses amenazados por el propio gobierno. Justo después se sumaron los equipos italianos, salvo la Juventus, y el Atlético de Madrid. La UEFA anunció entonces duras sanciones para los 'traidores'. Desde esta estampida general inicial y hasta ahora, ha sido el Barcelona quien ha dado la cara por el Real Madrid. Pero este simbólico abrazo lo cambia todo, el equipo madrileño se ha quedado sólo en su aventura. Joan Laporta se ha lanzado definitivamente a los 'brazos' de la UEFA y de la nueva EFC porque se ha cansado de navegar a contracorriente junto a Florentino Pérez.
¿Será sancionado el Barça por la Superliga?
Pero esta huida, como otras antes en el pasado, tiene su letra pequeña. El Barcelona nunca va a reconocer oficialmente que se lanza del barco porque, en caso de hacerlo, se expone a unas durísimas sanciones por parte de A22 (sociedad que gestiona los derechos de la Superliga). Los clubes fundadores que se retiraron en 2021 fueron sancionados con multas de 15 millones de euros además de la pérdida del 5 % de los ingresos de la UEFA por una temporada, y posibles multas adicionales de 100 millones si volvieran a participar en otro proyecto similar. Además había una última cláusula con otros 50 millones si no se alineaban con la UEFA después 2024.
Por eso el mensaje de Joan Laporta no es de 'ruptura' sino de reconciliación, pacificador y de tender puentes entre la UEFA y la Superliga. Romper con el sueño de Florentino Pérez tendría unas consecuencias económicas muy duras. Y no es lo más recomendable tratar de salir ahora de la crisis económica en la que lleva sumido el Barcelona desde hace varios años.
¿Supone esto la desaparición de la Superliga? Miguel Angel Gil Marín, director general del Atlético de Madrid, apuesta por ello. Sino de hecho, precisamente por las sanciones, si se puede considerar de facto. Un acercamiento del Barcelona a la UEFA donde busca también tener un trato más benévolo que permita eliminar las distintas amenazas de sanción que pesan sobre el club azulgrana.
Bernd Reichart, CEO de la Superliga
Vuelvo a hacer la misma pregunta: ¿son amigos o enemigos?¿Será este paso considerado como una traición en toda regla? Porque estos últimos años la rivalidad deportiva casi enfermiza en el campo, ha contrastado con una alianza estratégica en las finanzas. Especialmente desde el verano del 2022. Entonces el club blanco asesoró y ayudó a la entidad azulgrana en la búsqueda de las famosas «palancas» que permitieron entonces paliar la complicada situación económica del FC Barcelona y que pudiera acometer fichajes. Un postura que puede sorprendernos pero que se explica en que el Real Madrid es el primer interesado en un rival fuerte en favor de la competitividad de la competición.
El propio Florentino Pérez lo reconoció en la última asamblea de socios. Y en todas ellas tuvo una importancia capital Anas Laghari, persona de total confianza de Florentino Pérez, y a quien ordenó la búsqueda de inversores económicos precisamente para el proyecto de la Superliga. Anas Laghari es quien se encargó ese verano, de buscar a través de Key Capital un inversor al Fútbol Club Barcelona. Y como resultado de esta búsqueda apareció Sixth Street. Fondo que ha participado por ejemplo en la remodelación del Santiago Bernabéu, y que formó parte de las dos primeras palancas del Fútbol Club Barcelona con la compra del 25 % de los derechos audiovisuales para los próximos 25 años. ¿Qué va a pasar a partir de ahora?
Y más cuando el Barcelona también se ha distanciado del Real Madrid en su confrontación con LaLiga y a su presidente Javier Tebas. Confrontación que ha dejado en el pasado denuncias conjuntas por el acuerdo de LaLiga con CVC.
Enemigos acérrimos en el caso Negreira
Resulta que hasta ahora el Real Madrid y Barcelona iban de la mano en muchas cosas. Pero este idilio ya no es tal. Una relación de amistad que minimizaba el gran punto de discordia, además del deportivo, entre ambos clubes. Se trata del caso Negreira y donde se continúa investigando los 7,6 millones que el Fútbol Club Barcelona habría abonado al expresidente de los árbitros, José María Enriquez Negreira, desde 1994 hasta 2018 en concepto de asesoramiento arbitral.
Aquí la postura del Real Madrid ha sido tajante, personándose en la causa contra el Barcelona al considerarse como «entidad ofendida o perjudicada». Aún desconocemos las consecuencias del caso, si finalmente se prueba o no que la relación laboral de Negreira favoreció al Fútbol Club Barcelona.