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29 de marzo de 2024

El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page

El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page

Sánchez reforma el Código Penal al dictado de Junqueras

Page critica el «traje a medida» para ERC con la malversación y recuerda a Sánchez que los españoles «no lo piden»

El barón socialista lamenta que estamos ante una operación para beneficiar al partido de Junqueras, que este viernes presentará sus enmiendas para volver a cambiar el Código Penal a su dictado

El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, se ha mostrado contrario este jueves a la posible reforma del delito de malversación, un cambio que se hará a la medida de las exigencias de ERC y que fue anunciado por Pedro Sánchez en el propio día de la Constitución.
El partido de Oriol Junqueras presentará este jueves las enmiendas para cambiar el Código Penal en lo referente a la malversación con lo que ellos denominan una intervención «quirúrgica». En realidad, consiste en que ese delito no opere en el caso de los implicados en el proceso sedicioso separatista catalán, una aberración jurídica, pues supondría reformar la ley a la carta y al dictado precisamente de los delincuentes. Unos catorce inculpados de ERC se beneficiarían de la medida, que permitiría además el regreso el próximo año de Junqueras a las candidaturas a cargo público.
Page, que junto a Lambán y Vara es el único barón del PSOE que de vez en cuando todavía se atreve a criticar un poco la deriva de Sánchez, ha expuesto que los separatistas «quieren un Código Penal con nombre y apellidos, un traje a medida para conseguir lo que no consiguieron con los indultos».
El presidente castellano-manchego asegura que confía «muchísimo» en que el Gobierno se mantenga en no tocarlo en relación a los delitos de corrupción. «Es lo que piden los españoles», ha advertido.

La técnica de los globos sonda

Su optimismo está poco justificado, toda vez que Sánchez ya ha anunciado que está abierto a la propuesta de ERC, partido golpista al que debe el poder, y varios ministros, incluida la de Defensa, la supuestamente moderada Margarita Robles, ya han salido a cerrar filas a favor de esta insólita reforma. Como es ya habitual, el PSOE ha ido introduciendo la medida con la técnica de los globos sonda, como hizo con la eliminación del delito de la sedición. Primero se dice que no se hará y acto seguido se lleva a cabo, normalmente, tras un anuncio en el periódico pro gubernamental El País.
A preguntas de los medios antes del acto del Día de la Inmaculada Concepción en la Academia de Infantería de Toledo, Page ha lamentado que lo que buscan los independentistas es un Código Penal como «un traje a medida» y no «pensado en el futuro», sino centrado en «causas que ya han sido sentenciadas» y para «personas que ya han sido enjuiciadas».
Ha recordado que cuando el Ejecutivo central planteó los indultos a líderes independentistas, su posición fue de excluir el delito de malversación de esas medidas de gracia.
Page hizo una comparativa con la etapa en que el PSOE criticaba duramente la corrupción del PP. Así, recordó que relación a la trama Gürtel hay 36 sentencias relacionadas con el delito de malversación, y esta trama «es la que desembocó en una moción de censura» encabezada por el PSOE contra el Gobierno de Mariano Rajoy.
El pasado mes de noviembre, cuando la posibilidad de rebajar el delito de malversación todavía parecía una extravagancia casi imposible de hacerse real, los presidentes de Castilla-La Mancha y Extremadura, García-Page y Guillermo Fernández Vara, advirtieron que sería «difícil de entender» que se dificulte perseguir la corrupción y que además se haga respondiendo a intereses «difíciles de defender».
Sin embargo, se espera poca resistencia por parte de los barones socialistas ahora que ese imposible se está haciendo ya realidad. Al igual que ocurrió ante los indultos, con los que tampoco estaban de acuerdo, todo indica que se limitarán a críticas muy suaves y puntuales.
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