El ministro de Cultura y portavoz de Sumar, Ernest Urtasun, este lunes
La versión del Gobierno sobre la ausencia de España en Notre Dame se resquebraja: Urtasun culpa ahora a Albares
El Ministerio de Cultura cree que alguien debía haber asistido a la ceremonia, pero argumenta que la política internacional no depende de ellos
La maniobra del Gobierno de Pedro Sánchez para evitar que los Reyes representaran a España el pasado sábado en Notre Dame ha acabado enfrentando a los ministros de Exteriores, José Manuel Albares, y de Cultura, Ernest Urtasun. Como ha venido informando El Debate, la estrategia del Ejecutivo se basa en una versión inverosímil: sostiene que las invitaciones que envió el Elíseo a los Reyes y al ministro de Cultura eran personales e intransferibles y que, como Urtasun declinó ir y «no podía ir nadie en su lugar», ya tampoco podían ir los Reyes, al no tener un ministro de jornada que refrendara el acto, como establece la Constitución.
Urtasun, que se ha visto convertido en el responsable único de que España no estuviera representada en Notre Dame, ha recordado que su Ministerio no dirige la política exterior y ha echado la culpa de lo ocurrido a José Manuel Albares.
Fuentes de Cultura han explicado a la agencia EFE que Urtasun se limitó a excusar su ausencia, pero creen que alguien debería haber acudido a la misa solemne en representación de España, argumentando que la presencia internacional del país no depende de este Ministerio.
Albares se lava las manos
A pesar de polémica ocasionada, el ministro de Exteriores se ha lavado las manos. Desde París, donde participa en una reunión de la OCDE, José Manuel Albares no ha querido entrar en el asunto y se ha limitado a decir a los periodistas que le preguntaban: «Este es un tema que ni es ni ha sido del Ministerio de Asuntos Exteriores y por lo tanto no tengo ningún tipo de información y no les puedo decir nada más».
Tanto el PP como Vox han criticado la ausencia de España en la ceremonia del sábado. El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, calificó lo ocurrido como «una vergüenza» para España y criticó que, de nuevo, el Ejecutivo no estuviera «a la altura de la sociedad a la que debe servir».
El coordinador general del PP, Elías Bendodo, ha vuelto este lunes a cargar contra el Ejecutivo por este motivo al calificarlo de «preocupante» y censurar su «dejadez».
Mientras que el portavoz de Vox, José Antonio Fuster, ha denunciado la «cristianofobia alarmante» del Gobierno de Pedro Sánchez y ha subrayado que el cristianismo es esencial en la identidad occidental.
