El miembro de ETA durante el juicio
Absuelven al etarra Susper de posesión de armas y explosivos: «Me ocupé de captaciones y pisos, no de armas»
La sentencia considera que los delitos que se le imputaban ya estaban incluidos en una condena por daños de 2012
El miembro de ETA, Ibon Fernández Iradi, alias 'Susper' ha sido absuelto de uno delito de tenencia de explosivos, de depósito de armas de fuego y otro de depósito de armas de guerra ya que la Audiencia Nacional considera que ya fue condenado en la sentencia por daños que se dictó después del juicio por los atentados de los que ahora se le acusaba de haber aportado las armas y explosivos.
Durante el juicio, 'Susper' aseguró que él no había aportado las armas ni los explosivos ya que tenía el brazo izquierdo inmovilizado por una enfermedad que padece. Sí reconoció que él se encargaba del reclutamiento de nuevos terroristas y de buscar pisos y garajes.
Los magistrados explican que la acusación formulada en la presente causa ya aparece recogida en una sentencia de la Audiencia Nacional del año 2012, que fue casada por el Tribunal Supremo pero sólo en lo relativo al delito de daños.
«Partiendo de ello, de la lectura de varios de los pasajes de la sentencia de la Audiencia Nacional de 11 de junio de 2012, se comprueba la identidad fáctica entre los de dicha resolución y los recogidos en el relato fáctico acusatorio en el presente procedimiento, estando en sendos casos subsumidos unos y otros en idéntico precepto penal, a su vez contemplado en la STS1432/13, de 5 de marzo», indica.
'Los papeles de Susper'
Ibon Fernández de Iradi 'Susper' fue considerado el jefe militar de ETA, es decir, el responsable de los comandos que provocaban atentados.
En el año 2002 fue detenido en Francia, pero protagonizó una espectacular fuga en la comisaría de la gendarmería de Bayona al huir por los túneles del aire acondicionado. No obstante, fue localizado y detenido casi un año después y esta vez, además, se le incautó la agenda en la que contenía todas las reuniones que había mantenido, tanto con los responsables de los comandos terroristas como con posibles futuros etarras, lo que permitió la detención de más de un centenar de terroristas y de varios candidatos al ingreso en la organización terrorista.