La web3 es el nuevo internet que promete seguridad, velocidad y privacidad
Futuro
¿Qué es la web3? Todo lo que debes saber del futuro de Internet
Un nuevo internet se avecina y promete que será más seguro, más rápido y descentralizado
La web 1.0 nos acompañó entre 1991 y 2004. Webs estáticas donde los usuarios accedían y leían. La web 2.0 es la que nos ocupa ahora y que no tuvo competencia hasta 2017, cuando se empezó a hablar de la Web3. Ese segundo modelo daba soporte a contenido que podían subir y crear los usuarios como foros, blogs o redes sociales.
La definición de web 3.0 o Web3 no es fácil. A lo que se pueda decir de ella, necesita que al otro lado haya personas preparadas y capacitadas para entender el cambio y conocer los pilares sobre los que se apoya el internet del futuro.
Blackchain
El cofundador de Ethereum definió en 2014 que la web 3.0 como un «ecosistema on-line descentralizado basado en blockchain». Quizá eso nos aclare poco porque las palabras descentralizado y blockchain están todavía por formar parte de nuestro vocabulario.
Otra definición más entendible es la del inversionista Packy McCormick que la explica como «una internet que es propiedad de los desarrolladores y los usuarios, coordinada con tokens».
Las criptodivisas entran en el juego de la web3. Los mercados de este tipo de monedas son el ejemplo perfecto de descentralización, en este caso de las finanzas. La llamada DeFi (Decentralized Finances) es la capacidad de comprar, vender, invertir, pagar… hacer todo un ejercicio financiero sin la supervisión de los países u organismos financieros.
Beneficios
La web3 estaría amparada por cadenas de bloques. El blockchain es una base de datos avanzada que permite compartir información dentro de la red de forma transparente porque no es posible eliminar ni modificar nada sin el consenso de la red.
Un Twitter llevado a la versión web3 sería una red social donde los usuarios podrían monetizar sus datos u obtener propinas en criptos por publicar contenido.
Otro beneficio es que los actuales reguladores perderían su poder. La autocracia que tienen Facebook, Twitter o Google desaparecería si son los usuarios los que pueden gestionar esto mediante cadenas de bloques.
La privacidad es el tercer gran beneficio. Menos publicidad, más privacidad. Los modelos comerciales perderían importancia y el big data de los datos personales no serían tan necesario.
En contra
En contra de este sistema están los que dicen que las cadenas de bloques son lentas, que no absorberán todo el mercado o que esto es cosa de grandes inversores que estarían detrás de esto.
En resumen, la web3 no es una actualización de lo que conocemos. Es algo diferente que nos llevará a hábitos nuevos por lo que, podemos decir, que no será un ciclón, más bien, se irá adaptando a nuestro día a día.
En España, Telefónica es una de las grandes empresas que ha apostado por la web3 y ha fomentado el comercio con criptomonedas. En su última presentación de resultados anunciaron que el futuro de la empresa pasará por la evolución de las redes, los negocios descentralizados o el blockchain.
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