Inmigrantes para limpiar los culos
Si las pensiones de los nuevos jubilados superan ya al salario más común, ¿cuántos ciclistas de Glovo o limpiadores de culo necesitas por cada pensionista?
Mientras debatíamos sobre cuántas puestas lleva la «camisa de los incendios» de Pedro Sánchez, ha pasado un poco desapercibida la argumentación de un diputado del PSOE sobre la inmigración ilegal. Fue en el programa En boca de todos, de Cuatro, cuando Víctor Gutiérrez, que así se llama, defendió la llegada masiva de inmigrantes alegando que si no «quién le va a limpiar el culo a los abuelos». Resulta llamativo cómo los inmigrantes han pasado de ser los garantes de las pensiones a los mayordomos de nuestro estado de bienestar, pero está bien que la izquierda se vaya quitando la careta. Ahora, una cosa te digo: llega a ser un tertuliano conservador quien pronuncia esa frase y se lo llevan preso de plató.
El argumento de Gutiérrez es una muestra más de la inmadurez con la que el PSOE y la izquierda plantean este problema. Porque antes de afirmar con la margarita en solapa que un inmigrante viene a pagar las pensiones o a levantar la economía hay que hacer muchas preguntas (y sobre todo muchos números). La primera es cuánto cuesta la atención que recibe ese inmigrante hasta que consigue trabajar y cotizar de forma autónoma. ¿Le dará tiempo a ‘devolverlo’ de alguna manera? ¿Es mucho dinero? ¿Es poco? ¿Es más o es menos de lo que nos cuesta formar a un médico o a un ingeniero en la universidad pública para que se acabe marchando a otro país a ganar el dinero que aquí no puede? En segundo lugar, ¿por qué relegamos abiertamente a los inmigrantes a trabajos que los españoles hemos desechado? ¿No es ese un planteamiento clasista? ¿Puede que este proletariado contemporáneo y esta renuncia general estén lastrando los sueldos del conjunto del país? ¿Por qué España importa camareros o repartidores y no es capaz de retener a sus doctores y enfermeros?
Otra pregunta pertinente sería: qué pensiones van a pagar exactamente los inmigrantes que pretendemos arrinconar en trabajos físicos y mal pagados. Si las pensiones de los nuevos jubilados superan en un 23 % al salario más común, ¿cuántos ciclistas de Glovo o limpiadores de culo necesitas por cada pensionista? Si hablamos de la jubilación que le quedará a Puigdemont o a Ábalos, que no será pequeña, ¿cuántos inmigrantes te hacen falta? ¿Alguien ha echado esa cuenta? Porque muchos temporeros y camareros vas a tener que importar (de acuerdo con la óptica socialista) para mantener el tren de vida de toda esa gente. Pero este es un debate y un ejercicio que no interesa hacer, porque es mucho más cómodo (y sobre todo menos lesivo para tu reputación) decir que Refugees Welcome y que viva el Aquarius.
Yo no tengo respuesta para la mayoría de las preguntas que he formulado antes. Por eso me evito hacer el ridículo defendiendo, a ciegas y por epatar, una política cuyas consecuencias no he calibrado previamente.