León XIV habla con los periodistas a bordo de un vuelo con destino a Roma al término de su viaje apostólico
León XIV revela en el avión cómo vivió el cónclave: «Respiré hondo y dije: aquí estamos, Señor»
«Me rendí cuando vi cómo iban las cosas y dije que esto podría hacerse realidad», admitió en la rueda de prensa de regreso a Roma tras su viaje a Turquía y Líbano
durante el vuelo de regreso a Roma tras su viaje a Turquía y Líbano, León XIV concedió una rueda de prensa. Los periodistas le preguntaron por uno de los 'misterios' que más curiosidad despiertan dentro y fuera de la Iglesia: qué sintió en el cónclave que lo eligió y qué está aprendiendo en estos primeros meses como Sucesor de Pedro.
La pregunta era doble: qué es lo más difícil de aprender para ser Papa y qué ocurrió en el cónclave cuando «quedó claro lo que estaba pasando», como señaló la reportera. Su respuesta arrancó con una broma: «Hace solo uno o dos años yo también pensaba en jubilarme algún día».
Aunque explicó que «cree firmemente en el secreto del cónclave», y sabe que «ha habido entrevistas públicas en las que se han revelado algunas cosas», enlazó ese comentario con un recuerdo de la víspera de la elección: una periodista lo interceptó por la calle y le advirtió: «¡Se ha convertido en uno de los candidatos!». Su respuesta, entonces y ahora, fue la misma: «Todo está en manos de Dios».
Una convicción que no parece ser una frase dicha a caso, sino la línea vertebral de su vida interior. A los periodistas les recomendó un libro que lo ha acompañado durante años, La práctica de la presencia de Dios, del hermano Lorenzo, porque describe –dijo– un modo de oración que ha marcado su propio camino: «Uno simplemente entrega su vida al Señor y permite que el Señor lo guíe».
Y fue precisamente esa entrega la que emergió en el momento decisivo del cónclave. León XIV lo expresó con sencillez: «Me rendí cuando vi cómo iban las cosas y dije que esto podría hacerse realidad. Respiré hondo y dije: aquí estamos, Señor, tú eres el jefe, tú guías el camino».