Imagen postperihelio del objeto interestelar 3I/ATLAS, tomada el 5 de noviembre de 2025
Ciencia
Detectan la primera señal de radio procedente de 3I/ATLAS: estas son las implicaciones que tiene
El pasado 1 de julio, el sistema de sondeos astronómicos Asteroid Terrestrial-impact Last Alert System (ATLAS) descubrió la existencia de 3I/ATLAS, el tercer objeto interestelar –procedente del espacio profundo– que aparecía en nuestro sistema solar. A través de uno de sus telescopios ubicado en Río Hurtado, Chile, este cometa ha conseguido acaparar la atención de prácticamente toda la comunidad científica.
Sus anomalías, su gran velocidad, su peculiar forma, unido al silencio que impera desde la NASA como consecuencia del cierre que sufre desde hace un mes ha provocado que se disparen toda clase de hipótesis y teorías.
En este contexto, una de las figuras científicas más interesadas en el cometa ha sido el astrofísico de Harvard, Avi Loeb, quien ha señalado en distintas ocasiones la posibilidad de que 3I/ATLAS tuviera un origen tecnológico. En una de sus últimas publicaciones, recogida en Medium, el experto de Harvard ha señalado que 3I/ATLAS habría enviado la primera señal de radio hacia nuestro planeta.
«MeerKAT , un radiotelescopio de 13,5 metros de diámetro operado por el Observatorio Sudafricano de Radioastronomía, detectó líneas de absorción de radio producidas por radicales hidroxilo, concretamente moléculas OH, procedentes del objeto interestelar 3I/ATLAS», señalaba Loeb hace escasos días.
Radiotelescopio MeerKAT en Sudáfrica
En concreto, los expertos detectaron dos tipos de frecuencias, una de 1,665 GHz y otra de 1,667 GHz. Estas señalas mostraros pequeños desplazamientos Doppler, sugiriendo que el objeto se estaría desplazando a una velocidad de 98 kilómetros por segundo con respecto a la Tierra. De hecho, desde hace semanas el propio astrofísico avisó a los distintos observatorios a buscar emisiones de radio del cometa.
Lo más llamativo de todo es que el movimiento del objeto coincide casi a la perfección con la trayectoria de la señal «Wow!», detectada en 1977.
En este contexto, los astrónomos tienen especial interés en la siguiente fecha: 16 de marzo de 2026. Se espera que el cometa pase a 53 millones de kilómetros de Júpiter. En ese momento, la nave Juno utilizará su antena dipolo para buscar una señal de radio de 3I/ATLAS en bajas frecuencias, entre 50 y 40 megahercios.
Asimismo, otra de las fechas clave manejada por los expertos sucederá más pronto que tarde. El próximo 19 de diciembre el cometa alcanzará su máximo punto de acercamiento a la Tierra, situándose a unas 1,8 unidades astronómicas, es decir, unos 270 millones de kilómetros de distancia. Por ello, las siguientes semanas serán clave para el estudio y análisis del tercer cometa procedente del universo profundo tras Oumuamua y Borisov.