El edificio que acoge la sede del Ministerio de Sanidad ya es BIC
El bloque de ladrillo frente al Museo del Prado ya es Bien de Interés Cultural por voluntad del Gobierno
El edificio acoge las sedes de varios ministerios, entre otros, el de Sanidad
Se inauguró en 1955, en pleno franquismo, como Casa Sindical. Hoy acoge al Ministerio de Sanidad y al de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, y, antes, al de Juventud e Infancia.
Para su construcción hubo que derribar el interesante Palacio de Xifré, un palacete decimonónico construido a imagen de la Alhambra de Granada.
En pleno Paseo del Prado, el edificio del Ministerio de Sanidad con sus 16 plantas y su estructura masiva se alza amenazador frente al Museo del Prado, hogar de Velázquez, Goya, Murillo o El Greco.
Ahora, sin embargo, el edificio ha pasado a ser Bien de Interés Cultural por decisión del Consejo de Ministros y a propuesta del ministro de Cultura Ernest Urtasun en la categoría de Monumento, informa Europa Press.
El Ministerio de Cultura había iniciado en enero el procedimiento administrativo necesario para formalizar esta declaración, sustentándose en un informe de la Universidad Politécnica de Madrid que avalaba la medida.
El dictamen subrayaba el valor patrimonial, arquitectónico, cultural e inmaterial del inmueble como motivos suficientes para su inclusión en el catálogo de bienes protegidos.
El edificio, que se encuentra dentro del perímetro del ‘Paisaje de la Luz’, declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO en 2021.
En 1960, la Casa Sindical fue objeto de una ampliación concebida como una prolongación arquitectónica del bloque original. Esa segunda fase del complejo es hoy sede de Comisiones Obreras en Madrid. La protección como BIC se extiende al conjunto, reconocido por su relevancia dentro del panorama institucional y urbano de la capital.
El proyecto arquitectónico fue obra conjunta de Francisco de Asís Cabrero y Rafael Aburto, ganadores del concurso de anteproyectos convocado en 1949 por el entonces Ministerio de Trabajo.
Ambos profesionales colaboraron estrechamente en la elaboración del diseño definitivo que culminó en la actual Casa Sindical, un ejemplo paradigmático de la arquitectura institucional española de mediados del siglo XX.
Con esta declaración, el Gobierno refuerza la salvaguarda de un edificio emblemático no solo por su significación arquitectónica, sino también por su papel en la evolución de las instituciones estatales.
La iniciativa se enmarca en una estrategia más amplia de conservación del patrimonio cultural, en la que se incluye también la reciente declaración como BIC de la Residencia de Estudiantes, otro inmueble de gran relevancia histórica en Madrid.
