Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea
Por qué Von der Leyen no tiene un avión y qué va hacer la UE para garantizar su seguridad
La UE no dispone de un Ejército propio que pudiera facilitar el uso de aviones militares para mayor seguridad de la presidenta de la Comisión y en el actual contexto resulta una utopía pensar que algo semejante sería posible
¿Debería tener Ursula von der Leyen un avión para sus desplazamientos como presidenta de la Comisión? ¿Se justificaría la inversión en una aeronave para evitar incidentes como los del fin de semana pasado? Estas preguntas no parecen que estén sobre la mesa en Bruselas, pero sí un plan para aumentar la seguridad en las comunicaciones y los sistemas de navegación aérea.
La UE no dispone de un Ejército propio que pudiera facilitar el uso de aviones militares para mayor seguridad de Von der Leyen y en el actual contexto resulta una utopía pensar que algo semejante sería posible. El escenario en el Viejo Continente, con la invasión de Ucrania y la OTAN revolucionada con Donald Trump, es delicado y complejo. Pero en Europa son conscientes de que hay que adoptar medidas de protección ante un enemigo común como es Vladimir Putin.
El bombardeo en Kiev de la sede de la UE la pasada semana se interpretó como un aviso descarado del jefe del Kremlin. Los paquetes de sanciones del bloque van camino de la veintena y la Federación Rusa se resiente. Las amenazas de Trump por no poner fin a la guerra se han quedado, una vez más, en papel mojado cuando se trata del régimen de Putin y este ha demostrado que no le tiembla el pulso a la hora de elegir objetivos y más si llevan la bandera de la UE.
El domingo pasado el avión en el que volaba Von der Leyen a Bulgaria se quedó sin sistema de navegación GPS y tuvo que recurrir a los alternativos. Todos los indicios apuntan a que la mano de Vladimir Putin estuvo detrás de la desconexión del GPS del avión en el que viajaba la alemana o, al menos, así lo creen en la Unión Europea y en buena parte del globo terráqueo. La vida de la presidenta de la Comisión no estuvo en riesgo, pero pudo estarlo. Con esta advertencia del Kremlin, o de los piratas aéreos, Bruselas ha decidido profundizar las medidas de seguridad de los servicios de navegación.
Estamos estudiando la mejor manera de estar preparados para una situación de este tipoPortavoz de la Comisión europea. sobre el incidente del GPS
«Vemos la necesidad, por un lado, de seguir invirtiendo en defensa, pero también en nuestra preparación y por eso también estamos estudiando la mejor manera de estar preparados para una situación de este tipo», declaró en rueda de prensa Paula Pinho, portavoz de la Comisión Europea.
El incidente del domingo, aunque se conoció el lunes, hizo saltar todas las luces de alarma en Occidente. Las autoridades búlgaras confirmaron a Bruselas sus sospechas de que la intervención en el sistema de vuelo tenía el sello del Kremlin y el primer ministro, Rosen Zheliazkov, descartó con firmeza que se tratase de un ciberataque o ataque híbrido.
En ese contexto el Kremlin, por su parte, rechazó tener algo que ver con un suceso que, según los comandantes de vuelo, se registra a diario en miles de vuelos. Dicho esto, los indicios e investigaciones insisten en señalar con el dedo a Moscú.
«Lo que dijimos ayer y podemos confirmar hoy es que hubo interferencias en el GPS, pero afortunadamente el avión aterrizó sin incidentes y esta información nos la facilitaron las autoridades búlgaras de control del tráfico aéreo», señaló Pinho.
La portavoz, como recoge Europa Press, advirtió que, desde que se produjo hace tres años largos la invasión de Ucrania, «se ha producido un aumento considerable y muy notable de las interferencias» en las comunicaciones del este de Europa. «Hemos observado –añadió– que se trata de un fenómeno cada vez más frecuente y estamos poniendo en marcha instrumentos que nos permitirán hacer frente a este tipo de incidentes».
Dicho esto, pensar en comprar un avión para Von der Leyen no está en la agenda.