Fundado en 1910
Imagen de los candidatos a la presidencia de Honduras

Imagen de los candidatos a la presidencia de HondurasEFE

La UE y la OEA exigen respeto a los resultados en Honduras mientras crecen las denuncias de fraude y el Parlamento acusa a Trump de «injerencia»

Honduras continúa inmersa en una crisis política marcada por la incertidumbre, la desconfianza y la presión internacional

La incertidumbre postelectoral en Honduras aumenta más de una semana después de los comicios generales del 30 de noviembre. Con miles de actas aun sin resolver y denuncias cruzadas de fraude, las misiones de observación de la Unión Europea y de la OEA instaron este miércoles a los partidos políticos a respetar la voluntad popular y a permitir que el escrutinio avance con transparencia. Al mismo tiempo, el Parlamento hondureño acusó al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de interferir en el proceso a favor del candidato oficialista.

La Misión de Observación Electoral de la UE, pidió a los actores políticos que respeten el veredicto de las urnas, cuyos resultados oficiales aún no han sido publicados. Animó además a utilizar los mecanismos de trazabilidad habilitados por el Consejo Nacional Electoral (CNE) y los recursos legales disponibles para resolver cualquier impugnación.

La delegación europea exigió al CNE y al Tribunal de Justicia Electoral actuar con imparcialidad, evitando retrasos o decisiones de carácter político que puedan generar más desconfianza.

Por su parte, la Misión de Observación de la OEA llamó a partidos y candidatos a esperar los resultados oficiales y mantener vigilancia activa sobre los escrutinios en curso. La organización reclamó «máxima transparencia», pidió al CNE agilizar el conteo y advirtió contra cualquier intento de alterar el orden público durante el proceso. También recordó que continuará observando la fase final del escrutinio, como establece la Carta Democrática Interamericana.

El CNE aún no ha terminado el cómputo debido a 2.773 actas con inconsistencias, que deberán someterse a un escrutinio especial que podría representar más de 500.000 votos. La fecha para hacerlo no ha sido fijada, aunque la ley otorga un plazo de 30 días tras las elecciones para anunciar los resultados definitivos.

El último conteo, con el 99,40 % de las actas procesadas, coloca en primer lugar al candidato del Partido Nacional, Nasry «Tito» Asfura, apoyado públicamente por Donald Trump, con 1.298.835 votos (40,52 %). Le sigue de cerca el aspirante del Partido Liberal, Salvador Nasralla, con 1.256.428 sufragios (39,48 %). En tercer lugar, se ubica Rixi Moncada, del gobernante partido Libre, con 618.448 votos (19,29 %).

Tanto Nasralla como el Partido Libre han denunciado fraude, aumentando la presión sobre el CNE.

El Parlamento sostiene que Trump intimidó a los electores al advertir sobre el posible no envío de remesas, lo que, según el comunicado, «manipuló el proceso electoral». La Comisión aseguró que no validará un resultado «manchado» por presiones internas vinculadas al crimen organizado ni por influencias externas.

La tensión comenzó a trasladarse al terreno social. Simpatizantes del Partido Libre, identificados como trabajadores del Servicio Autónomo Nacional de Acueductos y Alcantarillados (SANAA), protestaron frente a la institución y quemaron neumáticos. También se registraron bloqueos y disturbios en la carretera entre El Progreso y Tela, en el norte del país.

A la espera del escrutinio final, Honduras continúa inmersa en una crisis política marcada por la incertidumbre, la desconfianza y la presión internacional para evitar que el proceso derive en un conflicto mayor.

comentarios
tracking

Compartir

Herramientas