Amando de Miguel
Amando De Miguel (1937-2023)
En la mejor tradición intelectual española
Precursor de la sociología moderna, castigado por el franquismo e intimidado por el pujolismo, fue evolucionando hacia posiciones conservadoras
Nació en Pereruela (Zamora) el 20 de enero de 1937 y falleció en Madrid el 3 de septiembre de 2023
Amando De Miguel Rodríguez
Catedrático de Sociología formado en España y en Estados Unidos, ejerció la docencia sucesivamente en Valencia, Barcelona y Madrid. Fue autor de más de 150 libros y en su biblioteca particular disponía de alrededor de 13.000 volúmenes, uno de ellos dedicado por Pío Baroja.
La manera más de fiable de medir la solvencia de un intelectual consiste en hacer la lista de sus aportaciones novedosas en el campo de su especialidad. Las de Amando De Miguel en Sociología fueron incontables, empezando por aquel «Informe Foessa», realizado entre 1964 y 1966, medio siglo después del final de la Guerra Civil. Fue un retrato preciso de la sociedad española del desarrollismo, de sus afanes e inquietudes.
Ya nada fue lo mismo: no solo porque aquel informe de mediados sigue siendo una imprescindible referencia sociológica –se ha seguido actualizando ininterrumpidamente desde entonces–, sino porque hizo de Amando De Miguel una primera figura del debate público en la España contemporánea. Su sólida formación le precedía: premio extraordinario de fin de carrera (licenciatura) en Ciencias Políticas, obtuvo la misma calificación en 1961 tras leer su tesis doctoral, que versó sobre «La metodología y primeros resultados de la Encuesta sobre el empresario español». Semejante excelencia le permitió ampliar estudios en la Universidad de Columbia, en Nueva York. Allí se especializó definitivamente en Sociología.
La primera cátedra de Sociología que ganó fue la de la Universidad de Valencia. De allí pronto pasó a la de Barcelona. Tuvo que ser, precisamente, en la Ciudad Condal, donde se enfrentó por partida doble, en épocas y circunstancias muy distintas, a los zarpazos de la intolerancia. El primer episodio fue un artículo, publicado en una revista especializada, Temas, muy crítico con la homilía pronunciada por un capellán militar. El atrevimiento le valió de De Miguel un arresto domiciliario de seis meses.
Más fue el hecho de estampar su firma en el «Manifiesto por la igualdad de los derechos lingüísticos en Cataluña», cuando la administración pujolista iniciaba sus planes de hegemonía cultural, el que impulsó a De Miguel a abandonar de manera definitiva Barcelona y afincarse definitivamente en Madrid, donde ejerció la docencia hasta su jubilación en la Universidad Complutense.
Los conflictos lidiados con la autoridad política durante el posfranquismo y la Transición coincidieron con la publicación de alguna de sus obras más señeras: Sociología del franquismo; La herencia del franquismo; Cuarenta millones de españoles, cuarenta años después así como un premonitorio Universidad, fábrica de parados (1979), coescrito con Jaime Martín Moreno. Una vez consolidado el régimen democrático, De Miguel dedicó tiempo y espacio a desmenuzar el carácter de sus compatriotas en Los españoles y El espíritu de Sancho Panza: el carácter español a través de los refranes. Se adentró, asimismo en el género de la biografía política con La ambición del césar, un ensayo más bien crítico sobre el entonces presidente del Gobierno Felipe González, escrito juntamente con el periodista José Luis Gutiérrez.
Ambos mostraban en aquellas páginas su desencanto con el felipismo. En el caso de De Miguel, el libro plasmaba irreversiblemente su evolución desde el progresismo hacia posiciones más conservadoras, que se fueron agudizando con el paso de los años y que este colaborador prolífico de medios de prensa iba destilando en medios como, en fechas recientes, El Debate.
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