Uno era seguidor incondicional de Luiz Inacio Lula da Silva y el otro de Jair Bolsonaro. El odio pudo más que el respeto y se mataron a tiros.
El suceso ocurrió en la localidad de Foz de Iguazo a un puñado de kilómetros de las imponentes cataratas que comparten Brasil y Argentina y en la triple frontera que forman con Paraguay.
El guardia Marcelo Arruda celebraba su fiesta de cumpleaños. Conocido por su militancia política en el Partido de los Trabajadores (PT) como dirigente municipal, casi no le dio tiempo a reaccionar cuando entró el hombre que iba a agredirle,
Según informa Europa Press, el seguidor del actual presidente de Brasil directamente entró en la fiesta armado con una pistola y comenzó a disparar. El «petista» desenfundó su arma y ambos protagonizaron la «balacera» que terminó con sus vidas.
De momento se desconoce la identidad del hombre que irrumpió en la fiesta de los 50 cumpleaños de Marcelo Arruda, pero el suceso ha conmocionado ala sociedad brasileña que se prepara para las elecciones generales de octubre.
Jair Bolsonaro reaccionó en su cuenta de Twitter: Las autoridades deben investigar seriamente lo ocurrido y adoptar todas las medidas oportunas, así como ir en contra de los calumniadores que actúan como buitres para intentra perjudicarnos las 24 horas del día».
Lula había anunciado en su cuenta la muerte de «nuestro compañero Marcelo Arruda», aunque se cuida de mencionar la ideología del agresor. Por su parte, la Policia de Brasil calificó el suceso de un episodio de «intolerancia polítca».