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27 de abril de 2024

Putin discurso

Putin en el palacio del Kremlin, en MoscúAFP

210 días de guerra en Ucrania

Las reacciones internacionales a la movilización parcial decretada por Putin: «Es un signo de debilidad»

Los principales aliados de Ucrania muestran su preocupación por la escalada dialéctica de Putin sobre las armas nucleares, pero llaman a la calma: «Es una retórica que ya conocemos»

Rusia ha expuesto públicamente su debilidad y su fracaso militar en Ucrania. Así lo creen los principales aliados occidentales de Ucrania en las primeras reacciones al discurso de Vladimir Putin en la mañana de este miércoles.
Putin, en un mensaje dirigido a la nación, anunció una «movilización militar parcial» que supondría, según aclaró su ministro de Defensa, Sergéi Shoigú, la movilización de 300.000 reservistas.
El presidente ruso acusó también a occidente de tratar de «debilitar, dividir y destruir» Rusia y amenazó con el empleo de armas nucleares si se ponía en riesgo «la integridad territorial de nuestro país».
En ese sentido, se enmarcaría la convocatoria de los referéndums de anexión a la Federación Rusa del 23 al 27 de septiembre de las regiones ucranianas ocupadas por las tropas rusas de Lugansk, Donetsk, Zaporiyia y Jersón.
Si Ucrania continúa su legítimo avance por estos territorios que el Kremlin pasará a reconocer como territorio ruso, el gobierno de Moscú actuaría como si se tratara de un ataque contra Rusia.
La embajadora estadounidense en Ucrania, Bridget Brink, afirmó en un mensaje en Twitter que «los falsos referéndums y la movilización son signos de debilidad, del fracaso ruso. Estados Unidos nunca reconocerá las reclamaciones de Rusia sobre el territorio ucraniano supuestamente anexionado y continuaremos apoyando a Ucrania mientras sea necesario».

Una guerra de «tres días» que acaba en movilización de reservistas

El gobierno ucraniano no ha mostrado ningún signo de temor ante el anuncio de movilización parcial anunciada por Putin y, en su valoración del discurso del mandatario ruso, se lo ha tomado con humor.

«Una guerra que iba a durar tres días acabó con una movilización», señaló Mijailo Podolyak, asesor del presidente ucraniano, Volodimir Zelenski.

En un mensaje difundido en Twitter, Podolyak recordó que «En la ‘guerra de los tres días’, los rusos, que exigían la destrucción de Ucrania, acabaron recibiendo la movilización, el cierre de fronteras, el bloqueo de las cuentas bancarias, la cárcel por deserción y unidades especiales en organizaciones paramilitares privadas».

Podolyak termina haciendo referencia a las palabras del propio Putin que señalaba que las acciones militares rusas en Ucrania progresaban según lo previsto: «Todavía va de acuerdo al plan, ¿verdad? La vida tiene un gran sentido del humor».
La ministra británica de Exteriores, Gillian Keegan, declaró en la cadena Sky News que las declaraciones de Putin suponen «una escalada y, por supuesto, ahora el pueblo ruso será reclutado para esta guerra».
Señaló que el anuncio de Putin es «preocupante» y pidió tomar las amenazas del mandatario ruso «muy en serio».
También desde el Reino Unido, el ministro de Defensa, Ben Wallace, declaró en Twitter que Putin «y su ministro de Defensa han enviado a la muerte a decenas de miles de sus propios ciudadanos, mal equipados y mal dirigidos».
Asimismo, advirtió que «ninguna amenaza ni propaganda puede ocultar el hecho de que Ucrania está ganando la guerra, la comunidad internacional está unida y Rusia se está convirtiendo en un paria global».
En Alemania, el ministro de Economía, Robert Habeck, calificó el movimiento de Putin como «grave y erróneo». La movilización parcial, «con la que lleva a cabo una nueva escalada en esta guerra de agresión contra Ucrania, es un nuevo paso grave y erróneo por parte de Rusia», señaló.
Pese a ello, aseguró que «para mí y para el gobierno está claro que seguiremos dando a Ucrania todo nuestro apoyo en estos tiempos difíciles».
El primer ministro de los Países Bajos, Mark Rutte, se sumó a las voces contra el anuncio de Putin y señaló, en una emisora local, que «la movilización, y la convocatoria de referéndums, es una señal de pánico. Su retórica sobre las armas nucleares es algo que hemos escuchado muchas veces antes, y nos deja fríos. Todo forma parte de una retórica que ya conocemos. Aconsejaría mantener la calma».
El primer ministro de la República Checa, Petr Fiala, interpretó que «la movilización parcial anunciada por Vladimir Putin es un intento de intensificar aún más la guerra iniciada por Rusia en Ucrania, y una prueba más de que Rusia es el único agresor».
En su mensaje difundido en Twitter, señaló que «se necesita ayuda para Ucrania, debemos seguir haciéndolo en nuestro propio interés».
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